Jerarcas del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y del Instituto de Bienestar Animal (INBA) realizaron controles del estado de los vacunos en nueve plantas frigoríficas en las que, debido al paro realizado por la Federación Obrera de la Industria de la Carne y Afines (Foica), cerca de 5.400 vacunos (600 en promedio en cada planta) que debían ser faenados el viernes quedaron durante todo el fin de semana en los corrales.
Según informó a El Observador Marcia del Campo, presidenta del INBA, lo que más preocupaba era si la disponibilidad de alimento para los animales fue la adecuada.
“Fue una situación inesperada porque fue un paro sorpresivo. Ahora sabemos que tenemos que estar preparados para tener comida. No hubo problemas para conseguir fardos, pero en otra época si no hay disponibilidad hay que pensar en otra alimentación”, comentó, y añadió que tras los controles se corroboró que todas las plantas cumplían con los estándares y requisitos de bienestar animal.
Durante el fin de semana autoridades del MGAP, de la DGSG y del INBA, junto a sus equipos, realizaron una tarea coordinada para relevar la situación en las plantas frigoríficas que no pudieron faenar por medidas gremiales. pic.twitter.com/hQ3qRrsgWM
— MGAP (@MGAPUruguay) November 16, 2021
La paralización de las faenas, algo que sucedió en distintas jornadas de las últimas semanas, es una medida gremial que la Foica adoptó al no cristalizar un acuerdo en el marco de los Consejos de Salarios.
Del Campo indicó que la medida, por sorpresiva, no dio tiempo a detener los embarques, por lo que en las nueve plantas que fueron controladas ya habían llegado ganados para un día de faena.
La industria tiene la obligación de tener total disposición de agua para los animales que estén en sus playas de espera para la faena, pero además los controles se orientaron a la disponibilidad de comida, sombra y espacio de rotación en los corrales.
Algunos frigoríficos enviaron ganados de vuelta a los campos, aunque el número no fue alto, explicó.
“Alguna planta devolvió algo de ganado, aunque fue muy poco. Me pareció bárbaro que algunos productores aceptaran recepcionar de nuevo animales”, sostuvo.
Los controles fueron ordenados por el ministro Fernando Mattos, informó la presidenta. Ella recorrió algunas plantas, como el frigorífico Tacuarembó, Mattos visitó el frigorífico Carrasco y otros jerarcas como los integrantes de la Dirección General de Sanidad Animal (DGSA) y de la Dirección General de Servicios Ganaderos (DGSG) fueron a otros establecimientos.
Tras la indicación del ministro, los representantes del ministerio se pusieron en contacto con los referentes técnicos que la DGSA tiene en cada planta frigorífica para corroborar la situación de los animales y se dispusieron a realizar las visitas, detalló.
“Trabajamos súper articulados. Fue muy satisfactorio porque las cosas se estaban haciendo bien, actuamos rápidamente y nos aseguramos de que todo se cubriera”, agregó, e informó que desde el ministerio, en cuya órbita acciona el INBA, estarán atentos ante nuevas situaciones similares en la industria frigorífica.
Este jueves está previsto suceda una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) entre los representantes de los trabajadores y los de las cámaras empresariales, en búsqueda de una solución. Si no hay un acuerdo, es probable que el sindicato reanude las medidas de lucha con paros parciales o totales, según supo El Observador este miércoles.
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