Con sus emprendimientos, el uruguayo busca mejorar los procesos de las empresas a través de la inteligencia artificial generativa
Nicolás López tiene 22 años: trabajó en Globant, Tata Consultancy y creó tres emprendimientos.
Foto: Inés Guimaraens ¿Otro unicornio uruguayo? Nicolás López, un joven de 22 años que siempre admiró la “magia” de la tecnología, emprende en un lugar donde se catapultaron compañías uruguayas que hoy valen millones de dólares.
Se trata del Centro de Innovación y Emprendimientos (CIE) de la Universidad ORT, desde donde se impulsaron PedidosYA y dLocal.
A este joven –creador de un emprendimiento distinguido por Microsoft como la startup latinoamericana de mayor impacto en el campo de la inteligencia artificial–, siempre le gustó una frase del escritor Arthur Clarke. “Cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia”.
Este lector voraz, que cita libros sobre emprendimiento y tecnología a lo largo de una entrevista con El Observador, siempre le resonó esa frase para dar cada paso en su corta, pero intensa carrera.
La pasión por la tecnología marca el espíritu de este emprendedor.
Esa pasión comenzó con una actividad lúdica en su casa: desarmar objetos para ver qué había adentro. Nicolás contó entre risas que a su padre le enojaba cuando desarmaba computadoras para entender cómo funcionaban.
Sus padres observaban que la tecnología estaba en su ADN. Por eso, lo inscribieron en un curso de reparación de PCs con 14 años. Ahí comenzó a vincularse con gente mucho mayor que él y a detectar qué era lo que quería para su futuro. Luego, a los 16 años, decidió cursar estudios de analista en sistemas.
Dos años más tarde, como proyecto final de su curso, creó OneSearch, un emprendimiento que automatiza procesos manuales de escribanos y abogados. Llegó a tener más de 3 mil usuarios activos que pagaban por usar su plataforma.
Nicolás empezó a trabajar en Tata Consultancy y en sus tiempos libres trabajaba en este emprendimiento con personas a su cargo. Sus días eran eternos. “Era raro. Yo estaba en situaciones en las cuales estaba arriba de gente que tenía capaz que el doble de mi edad. Era un desafío ganarme el respeto de esa gente”, contó.
En noviembre de 2022, OpenAI lanza al público ChatGPT, una inteligencia artificial generativa que revolucionó el mundo de la tecnología y puso patas para arriba a diversas industrias.
Y pensó en crear un emprendimiento que ayude a las empresas a apoyarse en esta tecnología para resolver puntos de dolor de sus operativas diarias. Emprendía mientras había empezado a trabajar en Globant como desarrollador.
“Así fue que fundamos una consultora de inteligencia artificial generativa: ayudamos a empresas a entender cómo se paraban frente a esta nueva tecnología”, señaló. Se llamó Promtior.
El principal desafío que enfrentan muchas empresas es la gestión eficiente de sus procesos internos. En este contexto, el 90% del trabajo de Nicolás era ayudar a las empresas a comprender sus operaciones e identificar sus mayores dolores.
Uno de los problemas más usuales que detectó era el proceso rudimentario en el manejo de facturas. Hoy existen programas que permiten ingresarlos al sistema contable de manera automatizada. “Para entender cuál era ese problema había que haber hecho un mapeo de la empresa para detectar estos puntos críticos”, comentó.
Paradójicamente, ese era un trabajo “muy manual”, según describió Nicolás. Porque debía reunirse con todas las personas de la empresa.
Entusiasmado por la idea de facilitar la operativa interna de las compañías, López fundó otro emprendimiento llamado Horizon: busca automatizar la tarea de las empresas de descubrir cuáles son los procesos ineficientes y tareas repetitivas que podrían empezar a aplicarse con inteligencia artificial.
“Todo esto que yo venía haciendo con estas empresas anteriores de ayudarlos a entender cómo funciona su empresa y dónde estaban sus problemas, lo hacemos con inteligencia artificial generativa”, contó.
Esto significa que en vez de reunirse con un gerente para que cuente todos los problemas de la compañía, pone a disposición de todos los empleados de una compañía un chatbot para saber cuáles son los problemas más grandes que tienen.
Esto permite tener un panorama más completo de lo que sucede en la compañía. Es como una encuesta interactiva para todos los usuarios, utilizando IA generativa.
“Nosotros decimos que damos vuelta ChatGPT porque es el chatbot el que hace las preguntas”, contó.
El chat intenta entender el día a día de la persona, de manera conversacional.
La tecnología que desarrolló tiene en cuenta tres elementos “persona, procesos y tecnología”. Esta visión de López busca asegurar que la tecnología esté al servicio de la agilización de las tareas que hoy son repetitivas, pero que tenga presente la motivación del funcionario.
“Encontramos estudios que muestran que el 45% de los procesos dentro de las empresas son repetitivos y tienen un potencial de automatización, lo que lleva a que se pierda un 30% de ingresos cada año, empeorando la desmotivación de los empleados”, indicó.
El resultado son gráficos interactivos e informes que ayudan a los directores a tomar decisiones mucho más eficientes en sus compañías.
El emprendimiento camina rumbo al éxito. En el programa en el que fueron distinguidos por Microsoft encontraron clientes potenciales en Estados Unidos y ya tienen varios en Uruguay.
Nicolás tiene algo claro: rodearse de personas que saben mucho más que él sobre temas que no maneja. A todas esas personas las anotó en la aplicación de notas de su celular desde que comenzó en este mundo de las startups. Ahora las convocó para profundizar sobre este proyecto.
Y les puso nombre y apellido a algunas de esas personas: Nicolás Scopesi, cuya plataforma Agrofy ha logrado captar 80 millones de dólares en inversiones; Miguel Langone, un ingeniero forense en criptomonedas que ha colaborado hasta con el FBI en la detección de fraudes; y Bárbara Grunfeld, una abogada de gran renombre, ha brindado su respaldo legal a las iniciativas de López.
“Son como superhéroes. Son aquellas que siempre dije que si quiero construir algo para de verdad romperla, quiero que forme parte”, contó.
Con este respaldo, solo imagina un futuro prometedor. “Hace tiempo vengo pensando cuál va a ser el siguiente PedidosYa a nivel del impacto que tuvieron”, cuenta. Y en su cuenta de LinkedIn dijo en uno de sus posteos: “Ver en grande ya no es una opción, es nuestro compromiso”.