En unos meses, Elon Musk pasó de expresar su claro apoyo a Donald Trump a aparecer en sus actos de campaña y luego a convertirse en una figura clave en su futuro gobierno. El multimillonario dueño de Tesla y SpaceX trabajó activamente en impulsar la carrera del republicano de vuelta a la Casa Blanca y para eso hizo un aporte de más de 270 millones de dólares, lo que lo convirtió en el mayor donante de la campaña.
El hombre más rico del mundo donó 238 millones de dólares a un Super PAC, que creó este año, America PAC, que hizo campaña por el republicano en los estados clave, según los datos sobre financiación electoral dados a conocer el jueves por la Comisión Electoral (FEC).
Pero el empresario también aportó otros 20 millones de dólares a un PAC creado pocos días antes de las elecciones, que hizo campaña para convencer a los votantes de que Trump no apoyaba una prohibición nacional del aborto. Este grupo, denominado RBG PAC, por las siglas de Ruth Bader Ginsburg, difundió avisos en los que decía que la postura del candidato republicano era similar a la de la fallecida jueza de la Corte Suprema, defensora del derecho al aborto.
"El uso de su nombre e imagen para apoyar la campaña de reelección de Donald Trump, y específicamente para sugerir que ella aprobaría su postura sobre el aborto, es poco menos que atroz", declaró la nieta de Ginsburg, Clara Spera, a The New York Times en octubre.
Si a esta contribución, que no se conoció hasta ahora, se le suman otras que hizo después del 18 de octubre, fecha de cierre de una primera sumatoria de la FEC, los aportes de Musk a la campaña de Trump y los republicanos superan los 277 millones de dólares, casi 80 millones más que Tim Mellon, heredero de un imperio bancario que donó 200 millones de dólares, apuntó The Washington Post.
De mayor donante a figura del gobierno
La apuesta de Musk por la candidatura de Trump, que se consolidó después de que el ex presidente fuera víctima de un intento de asesinato en un mitín el 13 de julio, le valió que el republicano le confiara junto a Vivek Ramaswamy la conducción del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental en su próximo gobierno, una agencia externa con la que aspira a eliminar regulaciones, reducir al mínimo el personal estatal y recortar gastos en miles de millones de dólares.
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Elon Musk y Vivek Ramaswamy se reunieron con congresistas para hablar sobre sus planes para reducir el gobierno
ROBERTO SCHMIDT / AFP
En el marco de su rol en la nueva administración Trump, Musk y Ramaswamy se reunieron esta semana con congresistas en Capitol Hill para hablar sobre sus planes para reducir el gobierno federal.
La estrecha relación del dueño de la red social X con el presidente electo podría presentar un complejo conflicto de intereses, dados los miles de millones de dólares en contratos gubernamentales que Musk ha recibido para SpaceX y Tesla.
El empresario sudafricano fue ganando poder político y muchos lo consideran del círculo más cercano de Trump. Estuvo junto al mandatario electo en una llamada con el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, y se lo vio junto a Trump en Mar-a-Lago en la celebración de la victoria electoral y en la cena del Día de Acción de Gracias. Además, según Axios, chocó con algunos miembros del equipo del republicano sobre los elegidos para el gabinete.
Entre sus últimos nombramientos, Trump eligió a Howard Lutnick, director ejecutivo de la firma de Wall Street Cantor Fitzgerald, como secretario de Comercio, un candidato que era respaldado por Musk. En tanto, esta semana designó a David Sacks, ex director de operaciones de PayPal y amigo del dueño de Tesla, como su "zar de la IA y las criptomonedas de la Casa Blanca".
