Varios granjeros decidieron tirar al menos una buena parte de su producción de tomate, considerando que hay una oferta excesiva y el precio que obtienen no cubre en muchos casos ni el costo del flete para trasladarlo a su destino para la venta, afirmó a El Observador Erick Rolando, directivo de la Confederación Granjera del Uruguay (CGU).
Este martes en el portal sanjoseahora.com.uy se publicó un video en el que se observa esa actitud, que no es nueva y ha sucedido en otras oportunidades, por ejemplo con manzanas y cebollas, cuando al productor no le sirve llevar la mercadería a la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM) o directo a otro punto de venta cuando pueden evitar la intermediación.
Embed - Tiran toneladas de tomates por excesos de producción en Canelones y Montevideo
Precio del tomate: deprimido
Rolando dijo que desde diciembre, sobre todo, se han dado condiciones ideales para la producción de este fruto, lo que generó una producción excesiva que lejos está el mercado local de captar en su totalidad, por lo cual el precio se deprimió rápidamente.
"El productor no cubre el costo, pero ni cerca, ven que no les sirve cosechar y dejan que el tomate quede en la planta y caiga, y el que lo cosechó y llevó a la venta muchas veces lo deja a pérdida o se lo trae de vuelta y termina tirándolo", contó.
Detalló que ese video es "solo un ejemplo de lo que pasa", que ahí se tiraron tomates de unos 100 cajones y que si bien es difícil estimarlo "seguro se han tirado ya muchas toneladas en distintos lugares, porque hay gente que lo hace y no lo dice además".
El problema, señaló, es que "no existe acá una regulación para plantar el área que es necesaria, entonces mucha gente se larga a plantar a lo loco, capaz gente que no venía plantando suma el rubro también y pasa esto de que hay un año climáticamente bueno, con buena agua, mucho tomate y al final un precio de ruina".
Se añade a eso que "ahora hay mucha tecnología, variedades muy buenas, muy productivas y así levantar mucho tomate por hectárea es posible".
Lo ideal sería, apuntó, "de una buena vez buscar la manera de que haya una producción suficiente como para que no falte, pero que no sobre tanto".
El kilo a $ 30
Rolando dijo que una cosa es el precio del tomate en los supermercados, que está algo más arriba, pero que ha visto ofertas de tomates de alta calidad a $ 30 o $ 40 el kilo en ferias y puestos: "El productor precisa más o menos un dólar por kilo solo para cubrir el costo... y ese precio ni cerca está".
El costo productivo de una hectárea de tomate puede ir de US$ 6.000 y llegar al doble de eso dependiendo de la variedad y el paquete tecnológico aplicado. Hoy los granjeros lejos están de obtener ese diñero por lo que producen y dependen de otros ingresos, por otros rubros y/o actividades, para sostener sus sistemas productivos.
El productor, cuyo predio está en Canelones, admitió que no hay una fecha para señalar como el fin de este problema, dado que eso dependerá de una oferta que merme y el consumo al menos se sostenga.
Rolando también señalo que existe otro problema para los productos del rubro manzana, con base en el ingreso masivo de fruta brasileña que llega a un precio competitivo y perjudica a la producción local de ese rubro de la fruticultura local.
