Lo que importa
- La campaña agrícola 2024/25 podría alcanzar 140,9 millones de toneladas, la segunda mayor en volumen de la historia.
- Se esperan despachos por US$33.600 millones, US$1500 millones más que en el ciclo actual, pero lejos del récord de 2021/22.
- El clima en verano será decisivo, mientras que los bajos precios y costos altos limitan la rentabilidad.
- Persisten los derechos de exportación, un freno para el crecimiento sostenido del sector.
- Los márgenes brutos cayeron un 26% respecto al ciclo anterior, afectando especialmente a los productores que alquilan tierras.
Contexto
¿Qué proyecciones se tienen para la campaña agrícola 2024/25?
Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la producción total de granos podría alcanzar los 140,9 millones de toneladas, un 7% más que el ciclo actual. Esta cifra quedaría apenas por debajo del récord histórico de 141,5 millones registrado en 2018/19. Gustavo López, de la consultora Agritrend, proyecta un volumen levemente menor, de 138,5 millones de toneladas, pero coincide en que será la segunda mayor producción de la historia.
¿Cómo impactará en la economía del país?
La BCR estima ingresos por exportaciones de US$33.600 millones, lo que representa un incremento de US$1500 millones respecto al ciclo actual. Sin embargo, esta cifra está lejos de los US$41.800 millones logrados en 2021/22, un año marcado por precios récord. Para los productores, los márgenes brutos disminuyeron un 26% debido a una combinación de precios bajos y costos elevados.
¿Qué desafíos enfrenta el sector agrícola?
El clima es un factor determinante. Enero y febrero serán meses clave, ya que la falta de agua podría afectar los rendimientos. Además, los precios internacionales cayeron significativamente: la soja y el maíz presentan precios 15% y 7% menores, respectivamente, en comparación con la campaña anterior. Según Ramiro Costa, de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, esta caída de precios, combinada con costos de insumos altos, limita la competitividad y rentabilidad del sector.
¿Qué papel juegan las políticas públicas en este contexto?
El gobierno de Javier Milei eliminó retenciones en algunos sectores (leche y carne porcina) y redujo parcialmente en carne vacuna y aviar. Sin embargo, los derechos de exportación para cultivos clave como soja, maíz y trigo siguen vigentes, lo que, según los expertos, es un obstáculo para el crecimiento del agro.
¿Cómo afecta esto a los productores?
La rentabilidad es un desafío, especialmente para quienes alquilan tierras. Cultivos como la soja en el sur de Buenos Aires generan pérdidas de hasta 28 dólares por hectárea, mientras que el girasol ofrece resultados positivos, con ganancias de 241 dólares por hectárea. La variación en rentabilidad refleja diferencias regionales y la influencia del precio internacional de los granos.
Cómo sigue
El desempeño final de la campaña 2024/25 dependerá del comportamiento climático durante los meses críticos de verano. Si las lluvias acompañan, la cosecha podría consolidarse como la segunda mayor de la historia.
En términos de exportaciones, se espera un repunte moderado, aunque persisten desafíos en precios internacionales y competitividad. Los productores seguirán presionando por la eliminación total de los derechos de exportación como una medida clave para revitalizar el sector.
A largo plazo, el estancamiento del agro argentino exige no solo políticas fiscales más favorables, sino también inversiones sostenidas para superar los vaivenes climáticos y económicos que limitan su potencial de crecimiento.
