El especialista en ingeniería hidráulica y civil, Claudio Velazco, alertó sobre la falta de preparación de Argentina frente a los efectos del cambio climático. En una entrevista con el periodista Luis Majul, sostuvo que las ciudades del país siguen diseñándose bajo criterios obsoletos que no contemplan los fenómenos meteorológicos extremos, cada vez más frecuentes. Además, resaltó la necesidad de replantear el diseño de las infraestructuras urbanas y la falta de inversión en obras hidráulicas fundamentales.
Embed - "Argentina no está preparada para el cambio climático" - Claudio Velazco, ingeniero hidráulico
"Diseñamos para tormentas que ya no existen"
Velazco explicó que en la actualidad la ingeniería hidráulica en Argentina diseña infraestructuras basadas en tormentas de intensidades menores a las que realmente ocurren. "Se toma un valor promedio, pero la realidad nos muestra que las precipitaciones están siendo cada vez más fuertes y frecuentes", dijo el experto.
Ejemplificó la situación con lo ocurrido en Bahía Blanca, donde en pocos días llovió lo que normalmente cae en un año, generando inundaciones devastadoras. "Tenemos que rediseñar la forma en que construimos nuestras ciudades", afirmó. En ese sentido, destacó que mientras en otros países se emiten alertas climáticas con semanas de anticipación, en Argentina la infraestructura de prevención sigue siendo insuficiente.
El ingeniero subrayó que no se trata de eventos aislados, sino de un patrón creciente de tormentas extremas que podría agravarse en los próximos años. "Lo que antes llamábamos 'excepcional' está ocurriendo cada vez con mayor frecuencia, por lo que ya no es algo fuera de lo común", remarcó.
Obras hidráulicas pendientes y falta de inversión
En cuanto a posibles soluciones, Velazco mencionó que hay obras esenciales que deben ejecutarse para mitigar el impacto de las lluvias extremas. En el caso de Bahía Blanca, señaló la necesidad de ampliar el Canal Maldonado, construido en 1946, y mejorar la capacidad del arroyo Napostá, que transporta agua de una cuenca de 123 mil hectáreas.
"Si los desagües dentro de la ciudad no tienen por dónde salir, se terminan saturando y agravan las inundaciones", explicó. En este sentido, enfatizó que cualquier solución estructural debe contemplar el drenaje a gran escala, con capacidad suficiente para absorber el caudal generado por lluvias extremas.
Velazco también recordó la trágica inundación de La Plata en 2013, que causó 89 muertes y demostró la falta de infraestructura adecuada. "Si se hubieran hecho las obras necesarias antes, el costo hubiera sido mucho menor. Ahora se está calculando una reconstrucción de 400 mil millones de pesos, sólo para reponer lo que se perdió", advirtió.
Un cambio de paradigma necesario
Finalmente, Velazco destacó la importancia de cambiar el enfoque de la política pública en materia de infraestructura. "No podemos seguir negando el problema ni esperar otra catástrofe para actuar. Hay que construir pensando en escenarios críticos, como se hace con los terremotos en San Juan y Mendoza", concluyó.
El especialista subrayó que la discusión sobre la existencia del cambio climático es irrelevante en este punto. "Ya está sucediendo, no podemos perder más tiempo en debates políticos. Las inundaciones seguirán ocurriendo, y si no tomamos medidas ahora, el costo será mucho mayor a futuro", aseguró.
En la misma línea, criticó la falta de decisión política para encarar obras estratégicas a largo plazo. "Es un problema de inversión, pero también de voluntad. Si seguimos postergando estas decisiones, las consecuencias serán cada vez más graves", concluyó.
