Lo que importa sobre Argentina, el único país de la ONU en oponerse a una resolución contra la violencia hacia mujeres
- Argentina votó en contra de una resolución de la ONU que buscaba intensificar los esfuerzos para prevenir la violencia contra mujeres y niñas, siendo el único país en oponerse.
- La resolución, apoyada por 170 países, resalta el impacto desproporcionado de la violencia en línea hacia las mujeres y niñas, y pide a los Estados fortalecer leyes y políticas de prevención.
- Esta votación se suma a una postura similar tomada previamente en contra de otra resolución de la ONU sobre derechos de pueblos indígenas.
- La postura argentina responde a la nueva política exterior impulsada por Javier Milei, que busca diferenciarse de agendas globales de derechos humanos y desarrollo sostenible.
- La serie de decisiones en la ONU generó críticas y debate sobre el futuro de la diplomacia argentina en escenarios internacionales.
Contexto
¿Por qué Argentina votó en contra de la resolución sobre violencia contra mujeres y niñas?: Argentina justificó su postura señalando posibles ambigüedades en el documento de la ONU. En su declaración, la ministra plenipotenciaria Andrea Repetti destacó que el país valora la protección de los derechos humanos, pero percibe que el documento en cuestión podría promover prácticas culturales o tradiciones que, desde su perspectiva, entrarían en conflicto con los derechos de mujeres y niñas. Además, en un contexto de reestructuración de la política exterior bajo la administración de Javier Milei, Argentina busca alinearse con sus nuevos aliados estratégicos, como Estados Unidos e Israel, aunque estos países votaron a favor de la resolución.
¿Qué especificaba la resolución de la ONU sobre violencia de género?: La resolución aprobada por la ONU subrayaba la urgencia de combatir todas las formas de violencia hacia mujeres y niñas, especialmente en el entorno digital, donde el impacto suele ser desproporcionado. En el texto, la ONU exhorta a los Estados a implementar normativas y políticas que prevengan y sancionen estos actos, y a promover recursos para el acceso a justicia y servicios de apoyo a las víctimas. Además, la resolución reconoce la importancia de cerrar la brecha digital de género para empoderar a mujeres y niñas y asegurar su participación equitativa en la vida pública.
¿Cómo reaccionó la comunidad internacional a la postura argentina?: La postura de Argentina fue una excepción notable, ya que la gran mayoría de los países miembros votaron a favor de la resolución, y solo 13 se abstuvieron. Este voto en contra despertó críticas en el ámbito internacional, especialmente por su alineación con una visión de política exterior que prioriza otras relaciones geopolíticas y busca distanciarse de ciertos compromisos de derechos humanos. Sin embargo, la decisión no es aislada, sino que sigue una línea de votos recientes en los que Argentina también se opuso a resoluciones clave de la ONU, como la de los derechos de los pueblos indígenas.
¿Qué implica la postura de Argentina en términos de derechos de pueblos indígenas?: La reciente votación en contra de la resolución sobre derechos indígenas marcó el inicio de esta postura exterior. En su declaración, la delegación argentina argumentó que el documento de la ONU no garantizaba adecuadamente el acceso a los derechos humanos sin discriminación para las poblaciones indígenas y que algunas prácticas ancestrales podrían estar en conflicto con derechos fundamentales. La Argentina fue la única nación en oponerse a esta resolución, generando así interrogantes sobre su compromiso con los derechos colectivos y sus implicancias en el respeto de tradiciones y culturas indígenas dentro de su territorio.
¿Qué otras decisiones recientes destacan en la política exterior argentina en la ONU?: Argentina también causó controversia al votar en la Asamblea General en favor de una resolución que instaba a poner fin al embargo económico de Estados Unidos contra Cuba. Este voto, junto con el uso del término “Falklands” en un comunicado oficial, fue el detonante de la destitución de Diana Mondino de la Cancillería. Este cambio y la asunción de Gerardo Werthein como nuevo canciller refuerzan el alineamiento con la perspectiva de Milei, que se muestra crítico ante ciertas agendas multilaterales y busca redirigir las relaciones exteriores en función de intereses nacionales y alianzas específicas.
¿Qué otros aspectos subraya la nueva política exterior de Argentina?: La nueva dirección de la política exterior argentina se muestra renuente a adoptar resoluciones que respalden ciertos derechos de tercera generación o agendas como la Agenda 2030 y el Pacto del Futuro, promovidos por organismos internacionales. Este posicionamiento busca enfatizar la soberanía nacional y una agenda selectiva en cuanto a compromisos globales de derechos humanos y desarrollo sostenible. Con estas acciones, el gobierno de Milei pretende destacar una ruptura con las administraciones anteriores y una postura que privilegie una autonomía más pragmática en los foros internacionales.
Cómo sigue
La reciente serie de decisiones en la ONU causó tensiones y preguntas sobre el futuro de la diplomacia argentina en escenarios internacionales. Por un lado, la Argentina mostró una postura clara de diferenciarse de las resoluciones promovidas por organismos multilaterales en temas de derechos humanos y sostenibilidad, mientras que, por otro lado, busca alinearse más estrechamente con Estados Unidos e Israel en ciertos temas geopolíticos. Esta estrategia, sin embargo, dejó a la Argentina en una posición aislada en temas sensibles como los derechos de los pueblos indígenas y la violencia de género.
