El año parlamentario del oficialismo estuvo signado por dos grandes temas: economía y seguridad. La libertad Avanza pudo avanzar con buena parte de su agenda en ambos rubros. Sin embargo, la baja de la edad de imputabilidad quedó entre los pendientes del Congreso, dentro de un esquema que tiene como cara más visible a la ministra de mejor imagen del Gobierno, Patricia Bullrich, y un eje discursivo claro en torno a la inseguridad.
Con la agenda informativa centrada en el caso de la nena de siete años asesinada en La Plata en medio de un robo automotor, el oficialismo y sus aliados buscan instalar otra vez en el debate por la baja de la edad de imputabilidad y las modificaciones del régimen penal juvenil.
Si bien es cierto que el Ejecutivo incluyó en el temario de sesiones extraordinarias temas vinculados a la agenda de seguridad que logró sancionar, como el juicio en ausencia, la ley de reiterancia y la denominada “Ley antimafia”, no apostó por la modificación de la edad de imputación de delitos.
La explicación tiene que ver sobre todo, más allá de los cuestionamientos más duros de un sector del peronismo y la izquierda, con la discrepancia de algunos bloques aliados, como la UCR que buscaban modificar el articulado para aprobar el texto.
El último proyecto presentado al respecto fue impulsado por el bloque de LLA. Su presentación se dio en medio de otro caso que conmocionó a la opinión pública: el asesinato de un playero de una estación de servicio en Rosario a manos a un chico de 15 años.
En ese marco, y bajo el título de Reforma Pela Juvenil, el oficialismo presentó un proyecto para bajar la edad de imputabilidad a los 12 años. Las negociaciones con los aliados y con algunos referentes del peronismo hizo que finalmente el texto dejara en 14 años el límite para la responsabilidad penal de los jóvenes.
Más allá de los siete debates en Comisión y los cambios que se realizaron al proyecto, el texto nunca llegó al recinto.
La inseguridad vuelva a ser parte el debate en el Congreso
Ahora, ante un nuevo caso que conmociona a la sociedad y que tiene como víctima a un menor y como victimario a un adolescente, Laura Rodríguez Machado, la diputada del PRO que preside la Comisión de Legislación Penal, volvió a poner el tema sobre la mesa y aseguró que el tratamiento de la reforma “es una prioridad”.
En ese marco, y a través de su cuenta de Twitter, la diputada aseguró: “La reforma penal juvenil es un proyecto que va más allá de solo bajar la edad de imputabilidad, es una oportunidad para frenar la delincuencia juvenil”.
Además, en declaraciones a la prensa, la diputada por Córdoba sentenció que el proyecto presentado por el oficialismo a mediados del año pasado “tiene como objetivo primordial poner fin a la impunidad en los delitos cometidos por jóvenes y garantizar que el que las hace, las paga”.
En ese mismo sentido, explicó que “No puede haber impunidad. No importa la edad del delincuente, lo que importa es que la justicia actúe con firmeza y proteja a las víctimas”.
Así las cosas, a pocos días del inicio de sesiones ordinarias y del discurso presidencial en el recinto de Diputados, el oficialismo y el PRO parecen estar dispuestos a dar la batalla legislativa por el cambio de la ley penal juvenil.
Más allá de eso, según pudo reconstruir El Observador, en el seno de los bloques libertarios de senadores y diputados se espera que el presidente haga mención del tema y anuncie proyectos vinculados a la seguridad. Nadie descarta una reforma integral del Código Penal.
