El presidente Javier Milei le tomó juramento a Gerardo Werthein como nuevo ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, en un acto que tuvo lugar en el Salón Blanco de la Casa Rosada. Werthein, quien reemplaza a Diana Mondino en el cargo, juró sobre la Torá, en un gesto que el mandatario interpretó como una señal simbólica. Durante su discurso, Milei trazó una analogía entre la misión de Werthein y el relato bíblico de Abraham, indicando que, al igual que el patriarca judío, el nuevo canciller tendrá la tarea de “llevar mensajes de vida y libertad al mundo”.
Milei señaló que el uso de la Torá en la ceremonia reflejaba un mensaje espiritual para la gestión diplomática que pretende impulsar. “Te están mandando señales las fuerzas del cielo, Gerardo”, afirmó el presidente, quien vinculó el juramento a la Parashat Lej Lejá, un pasaje del Génesis en el que Dios le encomienda a Abraham un viaje de difusión espiritual y cultural. “Dios le dice que va a tener mucha influencia en las naciones del mundo”, comentó Milei, aludiendo a la responsabilidad internacional que ahora asume Werthein.
La ceremonia, que comenzó puntualmente a las 18.30 horas, se extendió por menos de diez minutos y contó con la presencia de miembros del gabinete de Milei, altos funcionarios y empresarios. Entre los asistentes se destacaron Patricia Bullrich, ministra de Seguridad; el jefe de Gabinete Guillermo Francos; los ministros Luis Petri y Federico Sturzenegger; así como Santiago Caputo, asesor presidencial. También participaron el titular de la SIDE, Sergio Neiffert, y otros referentes de la administración. Por parte del ámbito empresarial asistieron, entre otros, Marcelo Mindlin, Martín Migoya, Guibert Englebienne y Alejandro y Bettina Bulgheroni. Entre los familiares y amigos de Werthein se encontraban figuras como Zulemita Menem y el expresidente de River Plate, Rodolfo D’Onofrio.
Con su asunción, Werthein, quien hasta ahora se desempeñaba como embajador argentino en los Estados Unidos, anunció medidas para reducir costos en el servicio exterior. En los próximos días se avanzará con el cierre de embajadas y consulados en aquellos países con los que Argentina no mantenga una relación comercial significativa. En su lugar, el Gobierno planea instaurar Agencias Nacionales en algunas de estas ubicaciones, que actuarán como organismos delegados y se encargarán de la asistencia consular y trámites básicos para los ciudadanos argentinos en el extranjero.
Fuentes oficiales confirmaron que Werthein ya solicitó la renuncia de varios secretarios y subsecretarios de la Cancillería, con el objetivo de reorganizar la estructura ministerial. Entre los cambios se destaca la revisión de los nombramientos realizados por su antecesora, Diana Mondino, en áreas claves como Comercio Internacional, bajo la dirección de Marcelo Cima; Asuntos de Malvinas, liderado por Paola Di Chiaro; y Coordinación y Planificación, a cargo de Ernesto Gaspari.
Werthein también adelantó su intención de reorientar las prioridades del Ministerio hacia una diplomacia más enfocada en el comercio internacional y la eficiencia presupuestaria. Esta política incluye la reducción de personal en aquellas misiones diplomáticas que continúen operativas. La nueva estrategia busca concentrarse en las relaciones bilaterales con los países de mayor relevancia comercial para Argentina, dejando en un segundo plano la representación diplomática en naciones donde el intercambio comercial sea limitado.