Los gremios que se sienten perjudicados por la medida del Gobierno que desreguló los aportes al sistema de salud no esperarán a la conducción de la CGT y se preparan para ir en masa a tribunales.
Los sindicatos más pequeños sin representación en la mesa chica de la CGT trabajan en conjunto para evitar el desfinanciamiento de sus obras sociales.
La postergación para este jueves de la reunión de la mesa chica de la CGT para evaluar y fijar posición sobre el tema, despertó la ira en los sindicatos que se sienten más afectados por la medida tomada por el Gobierno.
Reclaman una postura más dura en lo colectivo y un apoyo irrestricto en cada casa particular. Nada de eso llegó por ahora.
El Observador dialogó con algunos de los dirigentes que suelen mirar con la “ñata contra el vidrio” las reuniones de mesa chica. Los dirigentes son tajantes al respecto: “Los Gordos hacen su juego, esta medida lo que hace al final de la vuelta es darles más poder. Buscan someter a los gremios chicos y dejarlos afuera de cualquier discusión”, explicaron.
En ese marco, agregaron: “Los rumores dicen que esto está charlado entre los Gordos y el Gobierno. No lo sabemos. Vamos a esperar a la reunión de mesa chica para ver que posición se fija en lo colectivo. Pero hay bronca”.
En el universo sindical que será cerca de 40 gremios lo que harán presentaciones individuales ante la Justicia. El planteo de fondo es que por una medida administrativa se cambia el espíritu del sistema de salud.
El principal cuestionamiento, no tiene que ver en si con la desregulación, sino con la modalidad. La medida anunciada por el Gobierno establece que los afiliados tienen 60 días para ratificar de seguir en las mismas condiciones, o sea tercerizando los aportes a través de las Obras Sociales. En caso contrario, de manera compulsiva, pasará a aportar directamente a sus prepagas.
En ese contexto, las expectativas sobre lo que pueda decir la mesa chica al respecto de la medida, crece con el corre de las horas dentro el mundo sindical. El posicionamiento de la cúpula cegetista puede profundizar aún más las diferencias con las convive la central obrera puertas adentro.