Tras seis meses de investigación, la Policía de la Ciudad desarticuló una compleja organización delictiva dedicada al robo y comercialización de vehículos y autopartes. La operación incluyó 29 allanamientos en diversos puntos de la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano y localidades del interior de la provincia, y resultó en la detención de 13 personas y la incautación de una gran cantidad de autos y piezas robadas.
La organización, liderada por un hombre conocido como "Pepinucho", operaba bajo una estructura detallada que incluía "levantadores" o ladrones de vehículos, "cortadores" encargados de desmantelarlos y falsificadores de documentos que facilitaban su venta en el interior del país y a países limítrofes como Paraguay y Bolivia. Con esta logística bien organizada, la banda no solo revendía los autos robados tras cambiar sus identificaciones, sino que también vendía sus autopartes en el mercado ilegal.
Un organigrama criminal meticulosamente coordinado
Según la Policía de la Ciudad, "Pepinucho" dirigía la organización desde el barrio de Monte Castro, en la Capital Federal, donde se encontraba la base de operaciones de la banda. Las tareas estaban divididas entre roles específicos: cortadores de autos, levantadores, transportadores de los vehículos robados, falsificadores de documentos y encargados de los movimientos bancarios. Entre los detenidos, figura un hombre que, pese a portar una tobillera electrónica por un robo previo, era el encargado de manejar las finanzas de la organización.
Las autoridades atribuyen al grupo al menos 94 robos de vehículos en la región. La investigación, llevada a cabo por la División de Sustracción de Automotores y Autopartes de la Policía de la Ciudad, comenzó en abril tras una serie de robos de camionetas Toyota Hilux. En esos primeros arrestos, se incautaron teléfonos que resultaron fundamentales para desentrañar la red. A través de esos dispositivos, los analistas accedieron a 60 mil archivos entre audios, mensajes y fotos, lo cual permitió identificar a los distintos actores de la organización y mapear sus conexiones.
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Operativos simultáneos y hallazgos sorprendentes
Los 29 allanamientos se realizaron en barrios de la ciudad como Monte Castro, Flores, Caballito y Villa del Parque, así como en localidades bonaerenses que incluían Caseros, Del Viso, San Fernando, San Martín, entre otros. Además, se llegó a Bragado, una ciudad ubicada a 200 kilómetros al oeste de la Capital Federal. La magnitud de la operación permitió a las autoridades desmantelar la infraestructura de la banda y capturar a sus integrantes.
En estos procedimientos, se secuestraron nueve vehículos: tres de ellos con pedido de secuestro por robo, entre los cuales se encontraba una Toyota Hilux que había sido sustraída en mayo en Morón. Los otros seis presentaban numeraciones adulteradas en el chasis y el motor, una práctica común en el mercado ilegal para evitar que los autos robados sean identificados.
Uno de los hallazgos más notables se dio en una propiedad de Tortuguitas, presuntamente perteneciente a “Pepinucho”, donde los agentes encontraron 500 autopartes, incluyendo ruedas, paragolpes, volantes, sistemas eléctricos y hasta computadoras de ignición de diferentes modelos. Entre los objetos incautados se hallaron también 23 celulares, múltiples llaves de ignición, stickers numéricos de chasis y motor, patentes adulteradas, un inhibidor de señal con diez antenas de alta potencia y dos kartings con el número de motor borrado. Este inhibidor, que alcanzaba una cobertura de 500 metros, se sospecha era utilizado para neutralizar las alarmas de los vehículos al momento de ser robados.
Una operación compleja con ramificaciones internacionales
La complejidad del caso radica no solo en la logística delictiva de la banda, sino en su alcance internacional. Las autoridades creen que, además de la venta local, una parte significativa de los vehículos y autopartes robados era destinada a mercados en Paraguay y Bolivia, donde se comercializaban tras la falsificación de documentos.
Los 13 detenidos quedaron a disposición del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 10, a cargo del Dr. Fernando Caunedo y la Secretaría 130 del Dr. Juan Álvarez Mato. Entre los imputados, además de "Pepinucho", se identificó a dos cortadores, un levantador, una contadora de la organización, un vendedor y tres falsificadores de documentación.
Repercusiones y el avance de la investigación
La Policía de la Ciudad continúa analizando los elementos secuestrados, que podrían vincular a la banda con más delitos en distintas zonas del país y en países vecinos. Las autoridades destacaron la importancia del análisis de las comunicaciones obtenidas de los teléfonos de los primeros detenidos, ya que permitieron no solo descubrir a otros integrantes, sino también las rutas utilizadas para mover los vehículos y las autopartes hacia sus compradores. El caso sigue en curso y no se descartan nuevos allanamientos y detenciones.
