La Ciudad de Buenos Aires avanza en la construcción de un mirador panorámico en el Obelisco, uno de los monumentos más emblemáticos de la capital. La obra, que incluirá la instalación de un ascensor panorámico, permitirá que miles de personas disfruten de una vista única de la ciudad desde los 62 metros de altura de la cúspide del monumento. Este nuevo atractivo turístico forma parte de un plan de revalorización de los monumentos históricos de la ciudad.
La instalación del mirador en el Obelisco responde a un ambicioso proyecto de ingeniería que busca potenciar el turismo en Buenos Aires, ofreciendo una experiencia similar a la que brindan otros monumentos icónicos del mundo. El ascensor panorámico será capaz de transportar a cuatro personas hasta los 55 metros de altura, y desde allí, los visitantes podrán acceder al mirador mediante una escalera caracol de 35 escalones, que los llevará hasta la cúspide.
Hasta ahora, el acceso al interior del Obelisco estaba limitado a personal especializado, que ascendía los 206 escalones de una escalera marinera con la asistencia de Defensa Civil, utilizando cascos, guantes de amianto y arneses por razones de seguridad. Con el nuevo ascensor, el acceso será mucho más sencillo, permitiendo que tanto turistas como residentes disfruten de la vista panorámica de la ciudad de manera más segura y cómoda.
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El ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi, destacó la importancia del proyecto para revalorizar el patrimonio urbano porteño y mencionó que la Ciudad cuenta con más de 2.400 monumentos y obras de arte al aire libre, lo que la convierte en un verdadero "museo a cielo abierto". "Trabajamos todos los días para mantener estos monumentos y mejorar la experiencia tanto de vecinos como de turistas", agregó Baistrocchi.
La obra en el Obelisco comenzó en julio de 2024 y está a cargo de un equipo multidisciplinario compuesto por ingenieros, arquitectos, técnicos y especialistas en seguridad. Se prevé que los trabajos, que ocupan una superficie de 160 metros cuadrados entre la base del monumento, la estructura del ascensor, la escalera de emergencia y el mirador, estén finalizados en aproximadamente ocho meses.
Un monumento histórico con un nuevo atractivo turístico
El Obelisco, creado por el arquitecto Alberto Prebisch e inaugurado en 1936 para conmemorar los 400 años de la primera fundación de Buenos Aires, es considerado uno de los símbolos porteños más representativos. Con 67,5 metros de altura y una base de 6,8 metros por lado, el monumento ha sido escenario de innumerables manifestaciones culturales y sociales a lo largo de los años. Ahora, con la incorporación del mirador panorámico, se espera que su valor como atractivo turístico se vea potenciado.
El Ente de Turismo de la Ciudad será el encargado de coordinar la propuesta turística del mirador, que se suma a otras iniciativas similares, como la reapertura de la Torre Monumental en el barrio de Retiro. Estas iniciativas buscan ofrecer a los turistas nuevos recorridos y circuitos que exploren el patrimonio arquitectónico y cultural de Buenos Aires desde diferentes puntos de vista.
El presidente de la Administración de Parques Nacionales, Cristian Larsen, celebró el avance de las obras y subrayó la importancia de generar espacios que permitan a los visitantes tener una nueva perspectiva de la ciudad. "El mirador del Obelisco será una experiencia única, que permitirá ver nuestra ciudad y su patrimonio de una forma completamente nueva", afirmó Larsen.
Debido a que el Obelisco fue declarado Monumento Histórico Nacional, cualquier intervención en su estructura debe ser reversible, es decir, debe poder desinstalarse sin afectar el monumento original. La estructura del ascensor fue diseñada para cumplir con esta premisa: está atornillada a las paredes internas del Obelisco y puede ser removida en su totalidad si es necesario. Por esta razón, la obra fue aprobada por la Comisión Nacional de Monumentos, organismo encargado de supervisar la conservación y protección de los bienes culturales del país.
El ascensor, que tendrá tres caras vidriadas, recorrerá el interior del Obelisco hasta los 55 metros de altura. El acceso al mismo se realizará desde la Plaza de la República, a través de una serie de ocho escalones que conectan con la base del monumento. Además, se instalará una escalera metálica paralela que solo será utilizada en casos de emergencia.
Una vez que los visitantes lleguen al descanso en el nivel 55, podrán acceder a la cúspide del monumento mediante la escalera caracol de 35 escalones, que los conducirá hasta las cuatro ventanas del Obelisco, desde donde podrán disfrutar de vistas panorámicas de Buenos Aires. Estas ventanas, orientadas en las cuatro direcciones cardinales, permitirán apreciar diferentes zonas de la ciudad, desde los rascacielos del centro porteño hasta los barrios más alejados.
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El proyecto, que ha generado expectativas tanto en la industria turística como entre los habitantes de la ciudad, promete transformar la manera en que se disfruta el Obelisco, incorporando un atractivo novedoso que busca atraer tanto a turistas nacionales como internacionales.
Obras y plazos de finalización
El avance de las obras del mirador del Obelisco está en manos de un equipo de trabajo conformado por entre cuatro y seis personas, que incluyen ingenieros, arquitectos y especialistas en seguridad. Desde el inicio de los trabajos en julio, se ha llevado a cabo la limpieza de los muros internos del Obelisco y se ha preparado la estructura para la instalación eléctrica que permitirá el funcionamiento del ascensor.
Asimismo, se realizó una adecuación del piso para la colocación de la escalera de emergencia, que será paralela al ascensor y estará disponible únicamente en caso de contingencias. La instalación de la estructura del ascensor, que fue previamente armada en fábrica, ya está en marcha y se espera que el proyecto esté completado en un plazo de ocho meses, es decir, para principios de 2025.
El Obelisco es uno de los puntos más visitados de Buenos Aires, y se estima que esta nueva propuesta turística generará un incremento en la cantidad de turistas que accedan al monumento. Desde el Ente de Turismo de la Ciudad, prevén que el mirador panorámico atraerá a miles de visitantes anualmente, convirtiéndose en una de las principales actividades turísticas de la capital.
