Contexto
¿Qué pasó en torno a la muerte de Liam Payne?: Liam Payne, exintegrante de One Direction, falleció el 16 de octubre de 2024 en el Hotel CasaSur, ubicado en el barrio de Palermo, en Buenos Aires. Según los informes de la autopsia, el músico sufrió una caída desde el balcón de su habitación, en la que estuvo solo, tras consumir alcohol, cocaína y un antidepresivo recetado. Los resultados toxicológicos indican que el consumo de estas sustancias ocurrió durante las últimas 72 horas previas a su muerte. Inicialmente, cinco personas fueron procesadas, pero solo dos permanecen detenidas, mientras que tres fueron sobreseídas. La fiscalía está intentando revertir este sobreseimiento apelando a las cámaras correspondientes.
¿Quiénes son los implicados en la causa?: Los principales imputados en este caso incluyen a Rogelio Nores, empresario argentino-estadounidense y presunto amigo y representante de Payne; Gilda Martín, gerente del hotel, y Esteban Grassi, jefe de recepción. Además, Ezequiel Pereyra y Braian Paiz, dos empleados del hotel, fueron procesados y continúan con prisión preventiva por suministro de estupefacientes. La fiscalía sostiene que Nores, aunque alegó ser solo amigo del músico, tuvo un papel activo en la provisión de drogas, o al menos en el suministro de dinero para que Payne las adquiriera.
¿Por qué la fiscalía apela las decisiones de sobreseimiento?: La fiscalía sostiene que la decisión de la Cámara de Apelaciones de sobreseer a Nores, Martín y Grassi carece de fundamentación adecuada y no toma en cuenta pruebas clave. El fiscal general Joaquín Gaset argumenta que no se valoraron adecuadamente las pruebas de comunicaciones entre Payne y Nores, así como los dispositivos electrónicos incautados que podrían revelar más detalles sobre el suministro de estupefacientes. Además, se menciona una grabación de una llamada al 911 realizada por Grassi, jefe de recepción, en la que alertaba sobre el riesgo que implicaba el balcón debido al estado de intoxicación del músico.
¿Qué pruebas están en disputa?: Entre las pruebas que la fiscalía considera clave están tres discos rígidos secuestrados de la recepción del hotel, la computadora personal de Payne y los teléfonos móviles de Nores, su pareja y otra persona vinculada al músico en los días previos a su muerte. Los fiscales señalan que estos dispositivos podrían proporcionar evidencia crucial sobre el suministro de drogas, y critican que las pruebas no se valoraron correctamente al momento de dictarse los sobreseimientos.
¿Cuál es la postura de los imputados sobre estos cargos?: Rogelio Nores, tras ser sobreseído, insistió en que no era el manager de Payne y que su relación con el cantante se limitaba a la amistad. En declaraciones previas, sostuvo que trató de ayudar a Payne a superar sus problemas de adicción, pero que, finalmente, la decisión de consumir drogas era responsabilidad del músico. En cuanto a la situación de Martín y Grassi, la fiscalía cuestiona la falta de acción por parte de ambos, pues no tomaron medidas adecuadas ante el estado de intoxicación evidente de Payne.
Cómo sigue
El próximo paso en la causa depende de la decisión de la Cámara Nacional de Casación y la Cámara Nacional de Apelaciones sobre los recursos presentados por la fiscalía. Estos tribunales deben evaluar si las pruebas adicionales presentadas por el Ministerio Público Fiscal son suficientes para reabrir la investigación sobre el suministro de drogas y el papel de los sobreseídos en la muerte de Payne. La causa sigue abierta, y la fiscalía está determinada a que se consideren todas las pruebas disponibles antes de que se tomen decisiones definitivas sobre las responsabilidades de cada uno de los imputados.