En la madrugada del domingo, se desató una intensa confrontación entre jóvenes a la salida de una discoteca en el centro de Rosario. Por razones que aún no se esclarecieron, dos grupos de chicas se enzarzaron en una pelea en plena vía pública. La situación fue documentada por testigos, quienes grabaron dos videos que posteriormente circularon en las redes sociales.
El violento incidente tuvo lugar a tan solo 100 metros de la discoteca Sara, situada en la intersección de avenida Carlos Pellegrini y Maipú, que anteriormente llevaba el nombre de Roma. Este lugar ya había sido escenario de noticias en 2019, cuando dos hombres en moto dispararon contra un grupo de jóvenes, dejando a uno de ellos herido.
En uno de los videos se pueden apreciar dos enfrentamientos en curso. Mientras los testigos lanzan gritos y observaciones sin intentar intervenir, las jóvenes se atacaban entre sí de diversas formas: tirones de cabello, patadas a la cabeza de aquellas que yacían indefensas en el suelo, empujones feroces y puñetazos.
La parte más impactante del video revela cómo una joven, tendida en la acera y luchando por protegerse de los ataques, fue asaltada por tres agresoras que la atacaron simultáneamente: le propinaron patadas en la cabeza, le pisotearon el cuerpo y le propinaron golpes en la cara con gran ferocidad.
"¡Mátala, mátala!", grita un joven mientras las chicas siguen desahogando su ira entre ellas. La situación se desarrolla sin la presencia de la policía ni intervención del personal del lugar; en lugar de ayudar, los testigos, que se habían reunido como si estuvieran en un combate de boxeo, solo alentaban a las participantes, convirtiendo la escena en un espectáculo vergonzoso.
De acuerdo con las autoridades policiales entrevistadas por este medio, no se registró ninguna denuncia relacionada con este incidente, ni se notificó al 911. No obstante, otros informantes de la ciudad afirman que hubo al menos ocho personas detenidas.
Hace cinco años, en esa misma intersección, se produjo un tiroteo violento en el que participaron dos asesinos a sueldo y un grupo de jóvenes. Uno de los chicos, de solo 18 años, tuvo que ser llevado en ambulancia al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez debido a múltiples heridas de bala en su cuerpo.