En la ciudad de Saladillo, una nena de 13 años se convirtió en madre, lo que provocó una reacción de la comunidad que se manifestó en protestas frente al hogar de su madre y su padrastro, quienes son señalados por los vecinos como los principales responsables y acusados de abuso.
De acuerdo con el informe policial, la joven se presentó en el hospital zonal Alejandro Posadas quejándose de intensas molestias abdominales. Sin embargo, al realizarle un examen, los médicos se dieron cuenta de que estaba en pleno proceso de parto y que tenía 35 semanas de embarazo.
Desde ese instante, la noticia se difundió rápidamente por la ciudad, ubicada a 180 kilómetros al suroeste de la Capital Federal, lo que llevó a numerosos residentes a organizarse y señalar a la madre y su pareja como responsables de la situación de la joven.
Imágenes compartidas en redes sociales mostraron un estado de gran agitación en la comunidad, donde ciudadanos enfurecidos lanzaban piedras y objetos contra la casa donde habitaba la joven, su madre y su pareja. A pesar de la presencia de un cordón policial, las medidas de control no lograron contener la ira de la multitud, quienes lograron causar daños significativos en la propiedad, incluyendo roturas de ventanas y otros desperfectos.
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Voces de algunos residentes afirmaban que la madre de la menor estaba prostituyendo a su hija y exponiéndola a diversas formas de abuso. Sin embargo, informes de medios locales indicaron que no se registraron denuncias anteriores que respalden tales acusaciones.
Dada la corta edad de la niña en proceso de parto, los médicos tomaron la decisión de alertar de manera inmediata a la Dirección de Niñez y Adolescencia del Municipio de Saladillo, así como a las autoridades policiales.
La mamá de la niña presentó una denuncia penal ante la fiscalía correspondiente, afirmando que no tenía conocimiento del embarazo de su hija, según reportaron fuentes judiciales de la localidad.
La investigación está a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2 de Saladillo, dirigida por Roberto Javier Berlingeri, aunque debido a que se encuentra en período de vacaciones, la fiscal subrogante Patricia Hortel asumió la conducción del caso. Sin embargo, su propia vivienda resultó ser un objetivo de los grupos de vecinos que se expresaron de manera agresiva sobre la situación.
A pesar de lo que declaró la madre, se conoció que tanto ella como su pareja son el foco de la investigación. Se anticipa que una de las acciones iniciales que tomará la Justicia será realizar una prueba de ADN con el fin de determinar la paternidad del bebé que acaba de nacer.
