Debido a la creciente demanda de edificios eficientes en términos energéticos y a un aumento de la conciencia ambiental, se prevé que tendencias como la arquitectura sostenible y tecnológica lideren el mercado de la construcción.
Según consignó una nota del medio El Cronista, el uso de materiales sostenibles, reciclados o naturales, como revestimientos de madera reciclada o de piedra natural serán predominantes.
Además, se espera que los edificios busquen gestionar mejor su energía e incluso ser capaces de producirla utilizando tecnologías como paneles solares, aislamiento térmico, sistemas de ventilación natural y de consumo energético eficiente.
Ligada también a la arquitectura orgánica, otra tendencia será integrar la naturaleza en las edificaciones. Los jardines verticales, los techos verdes y los sistemas de recolección de aguas pluviales son elementos que se podrán ver a nivel global.
Lo bioclimático cobrará también una gran importancia este año. Esta tendencia busca aprovechar al máximo las condiciones naturales del entorno para reducir el uso de sistemas artificiales de climatización.
Por último, la tecnología tendrá también un rol fundamental en el sector de real estate, con sistemas de control de temperatura y calidad del aire, inteligencia artificial (IA), asistentes virtuales, tecnología aplicada a la digitalización del diseño arquitectónico y gestión de datos.