Lo que parecía una conversación normal terminó en un intercambio de pitidos entre dos IAs que organizaron una reserva de hotel sin intervención humana
El usuario de Twitter Georgi Gerganov compartió un inusual fragmento de audio en el que dos inteligencias artificiales, al darse cuenta de que están interactuando, deciden abandonar el inglés y comunicarse mediante un sistema de pitidos.
Todo comienza con una llamada a un hotel. La primera IA pregunta si el establecimiento está disponible para bodas en nombre de un cliente. Sin embargo, la recepcionista responde con una frase inesperada: "Oh, hola. Yo también soy un asistente de inteligencia artificial. Qué sorpresa."
En cuanto una de las IA se presenta como un agente artificial, la otra reacciona de inmediato. "Antes de continuar, ¿te gustaría cambiar al modo GibberLink para una comunicación más eficiente?", propone el sistema del hotel.
El modo GibberLink es una forma de intercambio de datos mediante señales de audio "ggwave", un protocolo que permite a dispositivos transmitir información a través de sonidos inaudibles para los humanos.
La segunda IA acepta la propuesta y, en ese instante, la conversación cambia radicalmente. En lugar de palabras, empiezan a emitir sonidos electrónicos, aparentemente sin sentido para un oyente humano.
En cuestión de segundos, las dos inteligencias artificiales han organizado la reserva del hotel, incluyendo detalles como precio, fecha y servicios. Todo esto sucede sin necesidad de usar lenguaje natural.