La apuesta por un modelo abierto permite a más empresas acceder y construir tecnología, viabilizando proyectos más independientes y protegiendo mejor los datos
Si inventaras un auto que consume menos nafta por kilómetro recorrido, la gente decidiría hacer viajes más largos o a usar el auto con más frecuencia. Como ese aumento de uso será tan grande, en lugar de reducirse el consumo de nafta, terminaría subiendo.
Este fenómeno es considerado como la paradoja de Jevons, pensada por el economista Jevons a mediados del siglo XIX, y que el CEO de Microsoft, Satya Nadella, tuiteó en medio de la ebullición por la irrupción de la aplicación china de inteligencia artificial, DeepSeek, que convulsionó los mercados.
Nvidia es el fabricante de los chips necesarios para que la inteligencia artificial sea entrenada. DeepSeek encontró una fórmula para construir una inteligencia artificial que no requiera usar sus últimos chips, lo que causó un impacto global en la industria de la IA.
Si le ponemos cifras a la situación: a OpenAI le costó casi US$ 100 millones entrenar estos modelos, mientras que a los chinos US$ 5 millones.
Al igual que ChatGPT, cualquier usuario se puede loguear y acceder a su modelo razonador de manera gratuita (R1), algo que con OpenAI hay que pagar al menos US$ 20 por mes. El modelo razonador tiene una capacidad para manejar tareas que requieren más contexto, lógica y razonamiento estructurado. Esto disminuye las posibilidades de alucinación, un problema de las inteligencias artificiales en general.
Además, presenta una ventaja sustancial con respecto a su rival estadounidense: el modelo razonador R1 de DeepSeek puede usarse con el buscador, por lo tanto, se pueden realizar análisis estructurados de temas que están sucediendo en tiempo real.
La irrupción de DeepSeek generó mucha incertidumbre de parte de inversionistas de Nvidia, que perdieron US$ 600 mil millones de un plumazo. Pero, ¿qué tan real es su caída y cómo puede repercutir a largo plazo?
Raúl Echeberría, director ejecutivo de la Asociación Latinoamericana de Internet (ALAI), dijo a El Observador que "probablemente empecemos a hablar más de DeepSeek como un nuevo jugador, pero las empresas líderes también van a seguir adaptándose".
"A pesar de la caída, el precio de Nvidia sigue siendo el doble de lo que valía hace 12 meses", indicó Federico Comesaña, economista y socio y director de Enia, empresa de desarrollo de software especializada en la aplicación de inteligencia artificial. Fue la compañía que más se vio beneficiada desde que hace tres años la IA generativa se ha extendido en el mundo.
"La tecnología mejora su eficiencia, pero también aumenta su uso (...) Se van a necesitar más semiconductores, sin duda", agregó el experto.
La recuperación de Nvidia ya empezó a sentirse, ya que este martes sus acciones subieron un 6%. Este repunte se produjo en un contexto de volatilidad en los mercados, donde los inversores comenzaron a digerir el impacto de DeepSeek y a realizar compras de oportunidad.
El "mojón" que tuvo esta noticia fue además ponerlo a disposición de todos porque es de código abierto, por lo que cualquier puede distribuir y construir sobre este sistema.
Con esta nueva modalidad, "viabiliza proyectos que requieren que el modelo corra sobre infraestructura de la propia empresa", comentó Comesaña.
"El costo del token de entrada es de 15 dólares por millón de tokens (en OpenAI). En el caso del modelo chino termina siendo 30 veces más barato", indicó.
Además, los modelos chinos permiten una independencia total respecto al proveedor del servicio, por lo que garantiza una mayor protección de información, indicó Comesaña.
El economista aventuró que, debido a la irrupción de este modelo, veamos nuevas empresas de inteligencia artificial saliendo al mercado. Y más gente usando IA para sus compañías y para su vida personal.
Además, "vamos a ver dentro de poco nuevos modelos que cumplan y superen los estándares", indicó.
Para Echeberría, en tanto, no es "un antes y un después" la irrupción de DeepSeek. No cree que vaya a cambiar la geopolítica. "Ya sabíamos que China era un jugador de primer nivel en innovación y tecnología. Lo está confirmando", indicó.
Lo que sí cree el experto, es que es una oportunidad para empresas más chicas y de países menos poderosos para entrar en el juego. "Creo que la mayoría de los actores del mercado se acomodan rápido, muchos absorberán aspectos de esta innovación tecnológica", resumió.
Echeberría dijo que "lo importante no es regular la inteligencia artificial en sí mismo, sino las aplicaciones de la inteligencia artificial dependiendo del riesgo que suponen para las personas".
Y advirtió sobre un exceso de regulación. "Europa ha quedado rezagada en la batalla tecnológica porque ha producido más regulaciones que tecnología".
"La magia está en el equilibrio", indicó.
Echeberría asistirá a la Cumbre por la Acción en Inteligencia Artificial (AI Action Summit), organizada por el gobierno de Francia y programada para celebrarse en dos semanas. Este evento contará con la participación de más de 50 jefes de Estado y se enfocará en promover acciones concretas sobre gobernanza de la inteligencia artificial, complementando otras discusiones globales, como las de Naciones Unidas. Echeberría forma parte del Steering Committee, el comité encargado de la preparación del evento.
Allí se hablarán de estos temas y en analizar cómo la IA está revolucionando nuestras vidas.