Un ranking portuario mejoró la posición de Montevideo y lo ubicó entre los primeros 20 de la región. El estudio advirtió que pese a la recuperación observada en 2024, la actividad portuaria en América Latina y el Caribe estará marcada por la incertidumbre, con el desafío de adoptar nuevas tecnologías para asegurar su competitividad.
El informe fue elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y relevó la actividad de 96 puertos de la región.
El organismo señaló que el comercio marítimo global en contenedores entre 2020 y 2024 experimentó fluctuaciones significativas, influenciado por factores como la pandemia, las tensiones geopolíticas y los retos logísticos. Recordó que durante el primer trimestre de 2020 el comercio mundial sufrió una fuerte contracción debido a la disrupción de las cadenas de suministro, el cierre de puertos y la reducción de la demanda general.
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Tráfico mundial de contenedores
Pero en la medida que las economías mundiales comenzaron a mejorar en 2021, el volumen de TEUs (unidad de medida equivalente a un contenedor de 20 pies) movilizado mostró un repunte. No obstante, los cuellos de botella logísticos continuaron provocando retrasos y el aumento en los costos de transporte.
La posición de Montevideo
En la clasificación de 2023, los tres primeros lugar se mantuvieron incambiados respecto al año anterior. En primer lugar se ubicó el puerto brasileño de Santos con 4.284.387 TEUs. Después estuvo Manzanillo (México) con 3.698.582 y Bahía de Cartagena (Colombia) con 3.300.366. El Callao (Perú) y MIT en Panamá alternaron en el cuarto y quinto puesto.
La terminal chilena de San Antonio ocupó el undécimo lugar con 1.407.869 contenedores, seguido por Buenos Aires con 1.367.136.
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Puerto de Montevideo
Montevideo –que se había ubicado en el puesto 21 en 2022- quedó en el 20 con 1.125.190 TEUs. Esa cantidad de contenedores marcó el récord del puerto local. El año pasado se acercó a esa cifra al movilizar 1.115.417 TEUs, con descenso interanual de 0,8%. Otros puertos de América del Sur, como Valparaíso (Chile), Buenaventura (Colombia) y Río Grande (Brasil) quedaron posicionados por debajo de Montevideo.
El relevamiento de la Cepal contrarresta la mala visión del Banco Mundial sobre el desempeño de Montevideo, señalada en un informe de junio del año pasado, que también tomó datos de 2023. Ese documento –el Índice de desempeño de los puertos de contenedores (CPPI)- afirmó que el puerto estaba ubicado entre los 25 peores del mundo.
Ese posicionamiento generó molestia en la Administración Nacional de Puertos (ANP) y motivó una reunión con representantes del organismo internacional. La intención fue conocer con mayor profundidad los parámetros utilizados para establecer la medición. Sin embargo, con el paso de los meses no hubo mayores avances sobre ese tema.
El rendimiento de los puertos de América Latina
Cepal expuso que el rendimiento de la costa este de América del Sur mostró una evolución dinámica entre el primer trimestre de 2019 y el cuarto trimestre de 2023. La irrupción del covid-19 se hizo sentir en la primera parte de 2020, pero la actividad comenzó a recuperarse con el paso de los meses. A pesar de algunas oscilaciones, la tendencia al alza continuó y mostró al cierre de 2023 que la región logró estabilizar sus niveles de actividad portuaria.
El organismo expresó que puertos estratégicos de Brasil, Argentina y Uruguay tuvieron un papel importante en el crecimiento del tráfico de contenedores en esa región.
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Puerto de Buenos Aires
LUIS ROBAYO / AFP
En la primera mitad de 2024 se observó que la mayoría de los principales puertos de América Latina y el Caribe mostraron tasas de crecimiento. San Antonio (Chile) fue el que tuvo mayor expansión. La Cepal incluyó en el listado de los más dinámicos a Montevideo, con una mejora del rendimiento del 9,5%.
Desafíos para los puertos regionales
El informe expuso que durante 2023 y 2024 el sector portuario de América Latina y el Caribe estuvo caracterizado por una marcada volatilidad e incertidumbre. A pesar de una recuperación en el primer semestre del año pasado en términos de rendimiento, el contexto global continúa enfrentando grandes desafíos.
Uno de los obstáculos mencionados es la progresiva concentración en las alianzas navieras a nivel global, que ha beneficiado a grandes actores e incrementado la presión sobre los puertos más pequeños.
Como principal desafío marcó que el déficit de inversión en infraestructura sigue siendo el más importante para el desarrollo sostenible de la región. Esos números rojos, agravados por las disrupciones causadas por la pandemia, las tensiones geopolíticas y los fenómenos climáticos extremos, añaden complejidad a las interrupciones en las cadenas de suministro.
La Cepal afirmó que el futuro de la actividad portuaria en América Latina y el Caribe estará marcado por la incertidumbre, pero también por la necesidad de resiliencia. Por eso, la región deberá seguir adaptándose a un entorno logístico cambiante, donde la modernización y la adopción de tecnologías avanzadas serán esenciales para asegurar su competitividad y sostenibilidad a largo plazo, concluyó.