Las condiciones clínicas del papa Francisco se mantuvieron estables este miércoles, en su vigésimo día ingresado en el hospital Gemelli de Roma, y comenzó la fisioterapia motora, informó en la tarde de este miércoles el Vaticano.
"El Santo Padre también hoy ha seguido estable sin presentar episodios de insuficiencia respiratoria. En consideración a la complejidad de su cuadro crítico, el pronóstico permanece reservado", indicó la nota de la Santa Sede.
Asimismo, informó que continúa con su terapia de oxígeno a altos flujos y en la noche, como estaba programado, reanudará con la ventilación mecánica no invasiva, administrada con una máscara.
El pontífice argentino incrementó la fisioterapia respiratoria y comenzó con la motora o muscular: es la primera vez que el Vaticano alude a estos últimos ejercicios en su boletín diario.
Francisco pasó este miércoles sentado en el sillón y durante la mañana, en el apartamento pontificio en la décima planta del Gemelli, participó en el rito del Miércoles de Ceniza.
Luego se dedicó a algunas tareas laborales, algo que había interrumpido con las últimas crisis de los días anteriores.
"Ha pasado el día en su sillón"
"Ha pasado el día en su sillón", indicó el último reporte sobre su salud y añadió que el pontífice argentino había llamado a la parroquia de Gaza, como hace habitualmente para interiorizarse de la situación en el lugar.
"Debido a la complejidad de su cuadro clínico, el pronóstico sigue siendo reservado", insistió el texto oficial.
El pontífice, de 88 años, se encuentra ingresado desde el pasado 14 de febrero en el hospital Gemelli de Roma a causa de una neumonía bilateral y otros problemas respiratorios.