El guitarrista y percusionista gaditano, Pablo Domínguez, falleció a los 38 años a consecuencia de una grave enfermedad. La noticia fue confirmada por la agencia de representación de su padre, el reconocido pianista Chano Domínguez. La comunidad musical y numerosos artistas han expresado su dolor por esta pérdida irreparable.
"Pablito, nuestro niño precioso, nuestro compañero, nuestro artista… qué dolor sin consuelo…", escribió el cantautor Javier Ruibal en sus redes sociales, reflejando el pesar de quienes lo conocieron.
El legado de su trayectoria
A lo largo de su carrera, Domínguez exploró diversos géneros, desde el flamenco y el jazz hasta las músicas del mundo. Tras una etapa autodidacta, profundizó su formación en la Universidad de West London como Especialista en Tecnología Musical y en SAE Barcelona.
Su talento lo llevó a colaborar con grandes figuras como Niño Josele, Josemi Carmona, Chonchi Heredia, Javier Ruibal y la maliense Rokia Traoré, además de trabajar con músicos internacionales como Wu-Tang Clan y Lizzo.
Domínguez también dejó su huella en la industria de la moda, participando en proyectos musicales para marcas de lujo como Louis Vuitton, Vogue y Salvatore Ferragamo. Luego de vivir y desarrollar su carrera en Londres durante 15 años, regresó a Cádiz para emprender nuevos proyectos musicales.
El músico, padre de dos hijos gemelos de corta edad, falleció el lunes en un hospital de Cádiz. Sus restos fueron incinerados este martes en El Puerto de Santa María, en un acto íntimo que reunió a familiares y amigos.
Despedida de todos los sectores de la cultura
Artistas de diferentes ámbitos han rendido homenaje a Domínguez. La cantante Martirio expresó su dolor en redes sociales: "Qué dolor tan grande, perder tan joven y pleno de música, arte y humor a un pedazo de músico tan lindo y tan bueno. Rotos estamos quienes tuvimos la suerte de conocerlo... Descansa en paz, querido Pablo Domínguez".
La música española pierde a una de sus voces más versátiles y talentosas, dejando un vacío en el panorama artístico que solo su legado podrá llenar.
