A pesar de su divorcio, la hermana de Felipe VI, sigue en el ojo de la tormenta por los reclamos económicos de quien fuera su esposo. Sus hijos, criticados por su ausencia en la tragedia de Valencia.
La Infanta Cristina y su ex marido, Iñaki Urdangarin.
La Infanta Cristina enfrenta un nuevo capítulo de polémica en su vida personal, marcado por tensiones económicas con su exmarido Iñaki Urdangarin.
Aunque la separación legal se concretó hace más de un año, la negativa de Cristina a aumentar la pensión compensatoria ha destapado fricciones.
Según fuentes cercanas, esta negativa podría estar relacionada con intentos de chantaje. "Cristina no está dispuesta a aceptar más chantajes", aseguran, insinuando que Urdangarin podría estar utilizando información sensible para presionar a la familia Borbón.
En cuanto al acuerdo económico de divorcio, se manejan cifras que van desde 5.000 hasta 25.000 euros mensuales
, además de una indemnización que habría alcanzado el millón de euros.
A pesar de estas cifras, Urdangarin, sin un empleo estable, mantiene un estilo de vida que incluye viajes de lujo con su pareja, Ainhoa Armentia, y el uso de bienes como un Volvo registrado a nombre de la Infanta Cristina y una motocicleta de trail valorada en 5.500 euros.
En paralelo, ha llamado la atención la ausencia de los hijos de Urdangarin y Cristina en las labores solidarias tras la Dana que afectó a Valencia. Mientras cientos de jóvenes acudieron a ayudar en Paiporta, ni Juan Valentín, Irene, Miguel ni Pablo participaron. Esto resulta particularmente llamativo, ya que algunos de ellos han demostrado en el pasado una vocación cooperante, como en sus experiencias en Camboya.
