En España, la despoblación rural sigue siendo un desafío, pero en el pequeño pueblo de Bárcena de Bureba, en la provincia de Burgos, una pareja de Países Bajos decidió darle una segunda oportunidad.
Maaike Geurts y Tibor Strausz compraron esta aldea abandonada por 35 mil euros con un ambicioso objetivo: convertirla en un bosque comestible y atraer a más familias para repoblarla, según informa Diario de Burgos.
¿Qué es un bosque comestible y cómo lo crearán en Bárcena de Bureba?
Un bosque comestible es un ecosistema diseñado para producir alimentos de manera sostenible, imitando la estructura de un bosque natural.
En este tipo de proyectos, se cultivan árboles frutales, arbustos, plantas perennes y otras especies que pueden proporcionar comida, medicinas y materiales útiles sin necesidad de técnicas agrícolas intensivas.
El plan de esta pareja neerlandesa incluye:
Plantación de árboles frutales y vegetales perennes para generar un ecosistema autosuficiente.
Uso de energía renovable, con paneles solares instalados en una de las casas del pueblo.
Balsas de acumulación de agua y un sistema de riego de 600 metros para facilitar el cultivo.
Apertura del pueblo a nuevas familias interesadas en un estilo de vida ecológico y autosustentable.
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Una inversión de 350.000 euros para un pueblo con futuro
Para adquirir Bárcena de Bureba, Geurts y Strausz invirtieron 350.000 euros, obteniendo no solo un conjunto de viviendas antiguas, sino también 65 terrenos disponibles para futuras construcciones o rehabilitaciones.
Su meta es convertir la zona en un referente de sostenibilidad y vida rural comunitaria, ofreciendo la oportunidad de que más personas se sumen a esta iniciativa.
"Queremos que este lugar se convierta en un hogar para quienes buscan una vida más conectada con la naturaleza y la autosuficiencia", explicaron en entrevistas recientes.
¿Qué impacto tendrá este proyecto en la despoblación rural en España?
La historia de Bárcena de Bureba no es única en España. En los últimos años, varios pueblos han lanzado iniciativas para atraer nuevos residentes, ofreciendo desde casas a precios simbólicos hasta incentivos fiscales. Sin embargo, este caso destaca porque no solo busca repoblar el área, sino también desarrollar un modelo de vida autosustentable y ecológico, alineado con las nuevas tendencias de agricultura regenerativa y turismo rural sostenible.
Además, el proyecto podría servir como ejemplo para otros pueblos abandonados en Castilla y León, una de las regiones más afectadas por la despoblación en España.
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Imágenes del pueblo que fue adquirido por la pareja holandesa. (Idealista)
Un pueblo que espera nuevas familias
Actualmente, los nuevos propietarios de Bárcena de Bureba han iniciado la transformación del terreno, pero su visión va más allá. Esperan la llegada de al menos seis familias más, que compartan su interés por la autosuficiencia y la vida en comunidad.
Este tipo de iniciativas están despertando el interés de personas que buscan alternativas al estilo de vida urbano, ya sea por el impacto del cambio climático, la búsqueda de espacios más tranquilos o simplemente el deseo de un nuevo comienzo.
Bárcena de Bureba está a punto de renacer gracias a una idea innovadora que combina sostenibilidad, ecología y comunidad. Con el auge del turismo rural, el interés por la autosuficiencia alimentaria y el creciente número de personas que buscan una vida lejos de la ciudad, este proyecto podría convertirse en un modelo a seguir para muchas otras localidades españolas.
FUENTE: Diario de Burgos
