Desde que el pasado 26 de diciembre la Agencia del Cine y el Audiovisual Uruguayo (ACAU), revelara su proyecto de "la Casa del Cine", un edificio que será restaurado en la Ciudad Vieja de Montevideo para (entre otros usos) ser el depósito del archivo audiovisual del país, el proyecto dividió aguas en el sector.
La voz más contraria a este proyecto fue la de Cinemateca. La institución alberga desde hace décadas un profuso archivo fílmico, y reclama que la iniciativa impulsada por la ACAU significa una intervención del estado, y cuestionó la selección del edificio de La Ópera como albergue de este material.
"Cinemateca no integrará el archivo impulsado por la ACAU, por carecer este proyecto de cualquier seriedad y garantías para las instituciones que lo integren", dice el comunicado que publicaron luego del anuncio de la agencia.
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El respaldo de los cineastas al proyecto de la casa del cine
Más allá de la oposición de Cinemateca, otras instituciones que cuentan con sus propios archivos han respaldado el proyecto de la Casa del cine, y este domingo, un grupo de profesionales del rubro emitieron un comunicado apoyando la iniciativa de centralizar el archivo audiovisual uruguayo para preservarlo de la mejor manera posible.
58 personas, reunidas bajo el estandarte de Asoprod (Asociación de Productores y Realizadores de Cine del Uruguay), firman el texto, entre las que se incluyen Mario Handler, Walter Tournier, Lala Severi, Pablo Stoll, Esteban Schroeder y César Charlone.
Titulado "El Patrimonio Audiovisual no es de derecha ni de izquierda y trasciende los gobiernos", el comunicado señala que todos los intentos pasados y actuales de preservación de archivo "no han llegado en ninguno de los casos a realizarlo de manera eficiente y de acuerdo a los estándares internacionales".
Señalan que la iniciativa de la ACAU "es un buen comienzo" pero resaltan que las instituciones que aporten su material no pueden perder su autonomía.
"Apoyamos la iniciativa de tener un espacio del cine nacional que preserve sin distinción de origen, toda la cinematografía de Uruguay -existente y futura- en condiciones de preservación, catalogación y reproducción en la más alta calidad posible, a fin de ser difundido o utilizado en producciones, instancias educativas o investigaciones, bajo la autorización correspondiente", agrega el texto.
"Asimismo, la iniciativa que promueve la existencia de espacios utilizables por diferentes hacedores e investigadores del cine junto a lugares para el intercambio, el diálogo, la enseñanza y eventos que fortalezcan nuestro cine, es de nuestro apoyo", señalan, indicando que en el contexto actual de cambio de gobierno, este tema debe formar parte de la transición "como política cultural".
