Se trata de una de las cinco nuevas demandas que se suman a las más de cien ya presentadas por presuntas víctimas de Sean Diddy Combs
Sean Diddy Combs
EFE/ Paul BuckUna nueva denunciante del rapero estadounidense Sean 'Diddy' Combs, que se enfrenta a un centenar de demandas por abusos sexuales, es una mujer que asegura que en el año 2000, cuando ella tenía solo 13 años, fue drogada y violada por el cantante en presencia de "dos famosos".
Según los documentos judiciales desvelados en las últimas horas, la denunciante relata que el 7 de septiembre de 2000 ella trataba de "colarse" en la fiesta de los premios MTV en el Radio City Hall de Nueva York y se acercó con tal fin a las limusinas en las que llegan los famosos.
Allí, un chófer -presunto empleado del rapero- le dijo que ella era "del tipo de lo que Diddy buscaba" y la invitó a una fiesta privada del rapero en otro lugar, no sin antes pedirle firmar un documento de confidencialidad sobre lo que allí vería.
La denunciante, de la que se ha protegido su identidad, cuenta que tras ingerir una bebida una vez que estaba en esa casa, se sintió mareada y se tumbó en una habitación vacía, donde al poco aparecieron Diddy Combs con un famoso y una famosa que no se identifican. Los dos hombres supuestamente la violaron por turnos mientras la mujer miraba.
La mujer no ha querido nombrar a esos dos "famosos", al menos hasta el momento, y solo describió detalles generales de esa fiesta, como que en ella circulaban con profusión la cocaína y la marihuana.
Como consecuencia, la denunciante, hoy residente en Alabama, ha asegurado haber sufrido durante toda su vida "una profunda depresión que afecta cada faceta de su vida".
La defensa de Combs, que ha negado repetidamente cualquier episodio de abuso, sea contra adultas o menores, ha calificado este último documento como uno más de las "denuncias oportunistas" contra el cantante, y ha exigido conocer la identidad de la acusadora para no tener que "jugar al juego de las adivinanzas", según relata el New York Post.
Esta es una de las cinco demandas que se suman a las más de un centenar ya presentadas por presuntas víctimas del artista. Las nuevas alegaciones, como la mayoría de las anteriores, se han presentado de forma anónima.
La cadena NBC News ha obtenido acceso a estas nuevas denuncias presentadas el domingo en el Distrito Sur de Nueva York por el abogado Tony Buzbee, que tiene su oficina en Texas y se ha hecho cargo de las acusaciones.
Las cinco demandas incluyen acusaciones de que Combs agredió sexualmente o violó a los demandantes en incidentes separados entre 2000 y 2022, según la cadena estadounidense. Dos de los demandantes son hombres y las otras tres son mujeres.
Combs también está acusado de drogar a uno de los hombres y a las tres mujeres, según figura en estas denuncias.
"Dejaremos que las acusaciones en las denuncias presentadas hablen por sí mismas y trabajaremos para asegurarnos de que se haga justicia", dijo Buzbee en un comunicado publicado anoche.
“Esperamos presentar casos semanalmente nombrando al Sr. Combs y otros como acusados mientras continuamos reuniendo evidencias y preparando las presentaciones”, agregó en la nota que publica la cadena.
Las más de un centenar de denuncias que pesan sobre el rapero han sido presentadas de forma anónima por demandantes bajo los nombres genéricos de John Doe y Jane Doe en un tribunal federal en el Distrito Sur de Nueva York.
Combs fue arrestado el pasado 16 de setiembre en Nueva York y permanece en prisión sin derecho a fianza desde entonces.
El rapero se encuentra actualmente bajo custodia federal mientras espera un juicio por cargos de conspiración, crimen organizado, tráfico sexual y transporte para ejercer la prostitución. El cantante se ha declarado no culpable de todos los cargos.
El juicio contra el rapero y productor se celebrará el 5 de mayo del 2025 en Nueva York y se espera que se extienda durante un mes, aunque la Fiscalía federal advirtió de que podría prolongarse porque podrían presentar más cargos contra el artista de hip-hop.
Su caso, dada la cantidad de víctimas y de celebridades que pueden aparecer como cómplices, podría explotar como un segundo #MeToo -surgido en 2017 por las denuncias de acoso y abuso contra el productor cinematográfico Harvey Weinstein-, en este caso concentrado en el mundo de la música, que completaría así los 'trapos sucios' del primero, que consiguió airear el mundo del cine.
Con información de EFE
