El ascenso de Gustavo Petro en Colombia modificó un paisaje muy estable en la relación de ese país con los Estados Unidos. Era previsible: Petro es un dirigente de izquierda de vieja guardia. Su triunfo rompió una tradición ideológica en Colombia.
Por la vía de su retórica "antiimperialista", de los roces en la lucha contra el narcotráfico, la paz y seguridad regional, más la crisis migratoria en los Estados Unidos se tensó el vínculo. Pero el gobierno demócrata de Joe Biden hizo un esfuerzo para que las diferencias nunca desbordaran. Los republicanos, en cambio, apuntaron desde un inicio contra Petro.
Su pasado en la guerrilla del M-19 y su discurso izquierdista lo habían puesto en esa situación desde antes de asumir la presidencia de Colombia. A dos de haber empezado a gobernar, las sospechas se agravaron.
En el camino ocurrió la detención de su hijo Nicolás Petro, acusado de recibir dinero de narcos para la campaña de su padre. La congresista de Florida María Elvira Salazar es una de las pioneras en criticar a Petro por "sus políticas socialistas".
Colombia y el narcotráfico: ¿vuelta a los 80?
Presidenta del subcomité de las Américas en el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes, Salazar es una aliada clave de Donald Trump en el universo latino. Desde su banca se volvió en una activa crítica de Petro. "Colombia se está volviendo a hundir en los oscuros días de los ´80, cuando era famosa por la violencia y la droga", opinó tiempo atrás Salazar. Y reprochó que la administración de Biden suspendiera el monitoreo de cultivos ilícitos de coca en Colombia.
1692301089759.webp
El presidente Gustavo Petro con su par norteamericano Joe Biden en abril del 2023.
AFP
Desde el Departamento de Estado relativizan esa mirada ante El Observador USA. Y destacan que el gobierno de Petro colabora con los Estados Unidos en temas de inmigración, clima, comercio, democracia y derechos humanos. Un dato extra en esa línea: Colombia es uno de los 12 países de Latinoamérica que no participa del mega-proyecto económico y político chino de la Franja y la Ruta.
Joe Biden a su vez buscó en estos dos años mantener un diálogo institucional entre países. Así lo expresó en una reunión en la Casa Blanca con Petro en abril de 2023, llamando a Colombia "la llave del hemisferio". La jefa del Comando Sur de los EEUU, la Generala Laura Richardson, elogió la sólida y duradera relación militar forjada durante décadas de estrecha colaboración institucional con Colombia. Si Trump vuelve a la Casa Blanca, el tono de la bilateral será otro completamente distinto.
Pero en privado circula la desconfianza hacia Petro. El papel de mediador que está jugando el colombiano con Nicolás Maduro, empecinado en aferrarse al poder en Venezuela, será determinante para definir el tono de la relación con la Casa Blanca. El secretario Estado Anthony Blinken le acaba de agradecer al gobierno de Petro por sus gestiones rumbo a una transición negociada para que Maduro abandone la presidencial.
https://www.bbc.com/mundo/articles/c3ej1j81yk9o
Colombia restableció lazos diplomáticos con Venezuela después que asumió Petro.
AFP
Colombia sigue siendo la fuente de aproximadamente el 90% de la cocaína que ingresa a los Estados Unidos, según destacó la revista Américas Quarterly. Esta cifra no varía desde 1999, cuando las autoridades lanzaron el programa de asistencia masiva conocido como Plan Colombia. El énfasis de la política antinarcóticos de EEUU se desplazó hacia los opioides sintéticos como el fentanilo, ahora responsable de la mayoría de las muertes por sobredosis en Estados Unidos. Pero la cocaína sigue siendo una prioridad: es un mecanismo de entrega de fentanilo, lo que aumenta su letalidad y abuso, describió ese medio.
La Política Nacional de Drogas 2023 del gobierno de Petro desvía la atención del nivel más bajo de la cadena de suministro de drogas —los campesinos que cultivan hoja de coca— a las etapas más lucrativas del procesamiento, la exportación y el lavado de dinero de la cocaína.
La dificultad es que el cultivo de coca ha aumentado, una tendencia que comenzó antes de la presidencia de Petro pero que ahora ha alcanzado niveles históricos. En su informe más reciente, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) situó el cultivo de coca en más de 230.000 hectáreas, un aumento del 13% entre 2021 y 2022 y casi cinco veces desde 2013. Más alarmante aún, la ONU señaló que la producción potencial de cocaína aumentó un 23,4% con respecto a 2021-22, alcanzando un máximo histórico de 1.728 toneladas métricas.
El gobierno de Petro enfrentó los niveles más altos de cultivo de coca en la última década. Las autoridades colombianas responden que las incautaciones de drogas y la destrucción de laboratorios de cocaína aumentaron en 2023, con aumentos más dramáticos en lo que va del año. Algunos funcionarios estadounidenses están de acuerdo. Pero otros son más escépticos y sostienen que la interdicción de la cocaína ha aumentado porque se está produciendo mucha más cocaína.
Una iniciativa de inversión forzada que genera polémica
En un evento de reactivación económica celebrado en Manizales el viernes 9 de agosto, el presidente Gustavo Petro presentó su propuesta para abordar la crisis económica que enfrenta Colombia, revelando detalles de un controvertido proyecto de inversión forzosa. El mandatario anunció que su gobierno introducirá ante el Congreso una iniciativa destinada a movilizar una parte del ahorro depositado en los bancos, con el objetivo de canalizar estos fondos hacia proyectos de producción.
Durante su discurso, Petro explicó que la intención de su propuesta es utilizar un porcentaje de los ahorros públicos para ofrecer créditos a bajo costo, orientados a diversas actividades productivas. “Queremos ir al Congreso con dos proyectos o dos bloques de proyectos. El de la inversión forzosa, que es sacar del ahorro público en los bancos un porcentaje para destinarlo como crédito barato, con costo financiero pequeño, a las actividades de la producción, como se está haciendo desde hace décadas con la agricultura,” señaló el presidente.
Sin embargo, esta iniciativa no ha sido bien recibida por los empresarios y el sector financiero, quienes consideran inconveniente usar el ahorro de los colombianos para hacer inversiones en lo que determine el Gobierno.También fue rechazada por el expresidente Iván Duque. "Lo que llaman "inversiones forzosas" no es otra cosa que el inicio del "exprópiese" de los ahorros de la gente en los bancos", advirtió.Por ello, el expresidente aseguró que ni el Congreso de la República ni las Cortes pueden permitir "esta peligrosa agresión a los derechos de los ciudadanos. Proteger los ahorros es un deber moral".
