Donald Trump se impuso ampliamente en Florida y se quedó con los 30 votos electorales del estado, que confirmó su tendencia conservadora. El ex presidente obtuvo el 56% de los votos, frente al 45% de Kamala Harris en Florida, con más del 90% de los votos escrutados. La ventaja de más de diez puntos es la mayor que un candidato logró en el estado en 36 años.
El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, dio por ganada la elección a Donald Trump en un mensaje en la red social X.
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En las elecciones de 2020, Trump se impuso por más de 3 puntos contra Joe Biden en Florida. Aun perdiendo a nivel nacional, el republicano ganó en su estado adoptivo. Florida fue considerado históricamente un swing state, es decir un estado que pendula entre los demócratas y los republicanos, pero en el último tiempo se volvió demasiado adverso para los "blues", al punto de que el último candidato presidencial demócrata en imponerse ahí fue Barack Obama.
En comparación con las últimas elecciones, casi todo el estado giró a la derecha en 2024. Diversos analistas señalaron que el vuelco a la derecha de la comunidad hispana en Florida aportó a la ventaja del GOP en el estado, según The Miami Herald.
Las iniciativas por el aborto y la marihuana
Florida sometía además este martes a votación otras iniciativas, entre ellas la enmienda 4, que buscaba garantizar el derecho al aborto hasta el momento de viabilidad fetal y modificar así la restrictiva prohibición que rige actualmente, que no permite la interrupción de un embarazo después de las seis semanas, así como la enmienda 3, para legalizar el consumo recreativo de la marihuana.
Ninguna de las dos logró alcanzar el 60% necesario para ser aprobada. La enmienda 4 obtuvo el 57%, mientras que la enmienda 3 alcanzó el 56%, con más del 92% de los votos escrutados. DeSantis también confirmó el fracaso de ambas propuestas.
La elección para el Senado
El estado, donde 3,3 millones de hispanos estaban habilitados para votar (alrededor de un 20% del total), confirmó además al republicano Rick Scott para el Senado, que se impuso a la latina Debbie Mucarsel-Powell. Con el 55,7% de los votos frente al 42,6% de su rival demócrata, el resultado para Scott fue mucho mejor de lo que anticipaban las encuestas, que le daban una menor ventaja.
El ex gobernador, de 71 años, hizo campaña con una plataforma en la que propuso baja de impuestos, reducción del gasto y un fuerte control de la frontera, mientras que Mucarsel-Powel, de 53 años, se centró en la sanidad, una reforma migratoria y la protección del medio ambiente.
Scott se había convertido en senador hace seis años al llevarse el 50% de los votos y arrebatarle la banca al demócrata Bill Nelson.
