Reid Hoffman, cofundador de LinkedIn y de Inflection AI, expresó inquietudes sobre el papel que el empresario Elon Musk podría desempeñar en el gobierno de Donald Trump.
En un artículo en el Financial Times, señaló riesgos de favoritismo que podrían impactar negativamente la innovación tecnológica.
Hoffman se refirió la reciente designación de Musk como líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), un organismo que supervisará la regulación en sectores estratégicos.
Una de las principales preocupaciones de Hoffman es el impacto de Musk en la inteligencia artificial. Como propietario de xAI, Musk podría usar su posición para favorecer a esta compañía mediante contratos gubernamentales, regulaciones dirigidas o políticas restrictivas para otros actores del sector.
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En el Financial Times, Reid Hoffman señaló que el favoritismo de Trump por Musk podrían impactar negativamente la innovación tecnológica.
La carrera alrededor de la Inteligencia Artificial
“Usar su posición para favorecer a xAI de cualquier manera, como otorgarle contratos gubernamentales, alentar a las agencias federales a atacar injustamente a las empresas de inteligencia artificial o imponer nuevas regulaciones que limiten las exportaciones, se hará a expensas de la seguridad tecnológica, económica y cultural y la competitividad de Estados Unidos”, escribió Hoffman.
Las empresas de Musk, como Tesla, SpaceX y Neuralink, operan en industrias altamente reguladas. Hoffman advirtió que Musk, desde su rol en DOGE, podría influir en decisiones relacionadas con estas industrias, ya sea mediante recortes presupuestarios en agencias reguladoras o normativas que favorezcan sus intereses.
Hoffman recordó que, durante su primer mandato, Trump criticó públicamente a empresas como Amazon y a su CEO Jeff Bezos, lo que derivó en políticas específicas que afectaron directamente a estas compañías. El temor es que estas dinámicas se repitan ahora con Musk como figura clave en el gobierno.
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Elon Musk durante el acto de campaña de Trump en Butler, Pensilvania, a los saltos
Jim WATSON / AFP
Para Hoffman, cualquier percepción de favoritismo hacia Musk podría desincentivar la competencia en el sector tecnológico, dañando el ecosistema de innovación en Estados Unidos. Además, Musk tiene un historial de conflictos públicos con competidores, lo que podría trasladarse al ámbito político y afectar a rivales tecnológicos.
El impulso de Trump a las criptomonedas
A pesar de las críticas, Hoffman reconoció que algunas políticas de Trump, como un apoyo más claro a la industria de criptomonedas, podrían beneficiar el desarrollo tecnológico. Sin embargo, reiteró que es fundamental evitar favoritismos que comprometan la igualdad de condiciones en el mercado.
“Seguiré haciendo todo lo que pueda para construir la próxima generación de empresas que brinden oportunidades que cambien la vida de las personas y la sociedad”, concluyó Hoffman en su artículo.
El precio del bitcoin viene aumentando constantemente este año. Primero, impulsado por una batería de fondos cotizados en bolsa (ETF) de bitcoin que llegaron a Wall Street para quedarse (BlackRock tiene el mayor ETF de la criptomoneda). Pero el interés de Donald Trump en desarrollar al país como la "capital mundial de las criptomonedas" disparó otro auge. Un par de días antes de que el republicano ganara la elección, el bitcoin valía 68.000 dólares. En estos días está rozando los 100.000 y las proyecciones son de 200.000 para mitad del 2025 (según el banco de inversión Bernstein) y de 500.000 (según Metafide) para fines de 2027.