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"Trump y Milei están en la nueva derecha, que es un partido político internacional. La amistad de ambos se basa en el enfrentamiento con los socialistas, los progres y los wokes. Trump es el jefe de ese partido, y lo reconoce públicamente a Milei como su fiel compañero", opina el analista Julio Burdman ante El Observador USA.
"Lo que pasó acá fue impactante. La primera foto de Trump con otro presidente es con Milei. El poder político en Washington y financiero en Wall Street tomó nota", afirma desde DC un lobbista que conoce la trama del poder estadounidense al detalle.
Se refiere a la excursión exprés que hizo Milei a Mar-a-Lago. La mansión de Palm Beach, en Florida, se convirtió en la Casa Blanca de Florida en las últimos días. El libertario argentino saludó a Trump y participó en una gala por su victoria electoral en Mar-a-Lago,
Clima, género e impuesto a los ricos, los ruidos del G20
El brasileño pretende imprimir sus ideas en el comunicado final del G20, que empieza el lunes en el Museo de Arte Moderno de Rio. Se trata de una agenda más retórica que de aplicación práctica, tal como ocurre ante cada recomendación de los organismos multilaterales. De ahí, parte del desprecio de Milei a iniciativas como el Pacto del Futuro y la Agenda 2030. Eso y la opresiva cultura woke que les atribuye.
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El anfitrión Lula da Silva con la italiana Georgia Meloni, en la previa al inicio del G20.
AFP
Las resoluciones de la ONU o el G20 no son vinculantes ni describen hojas de ruta concretas para alcanzar una suerte de utopía de convivencia global.
Desde este lunes a la mañana, las 20 de las principales economías del mundo intentarán nuevamente alcanzar un punto de acuerdo. No será sencillo. El encuentro se da en un contexto de profundas divisiones por las guerras en Ucrania y Oriente Medio, por la propuesta de crear un impuesto a los superricos y por las diferencias para abordar la transición energética.
A diferencia de su archienemigo Milei, el español Pedro Sánchez apoya la creación de un impuesto global a las grandes fortunas.
A pocas horas para que empezara la cumbre, todavía se negociaba (sin éxito) un programa común. El documento final también se encontraba tironeado y sin perspectivas de acuerdo. ¿Podría terminar el G20 con un choque de posiciones explícito sobre la guerras en Ucrania y Gaza, con un Lula indulgente hacia Rusia y crítico hacia Israel? Hasta la noche del domingo esa era una posibilidad.
Devaluación del Real y una Río militarizada por la reunión de presidentes
Delegaciones de 55 países se reunirán en un precioso Museo con vista al mar. Ubicado en el centro de Río, el edificio está blindado como un fuerte. En realidad toda la ciudad fue copada por las fuerzas de seguridad. Unos 20.000 militares y policías convirtieron el barrio carioca de Flamengo en un búnker.
Vía decreto, Lula autorizó a los militares a tomar eventualmente atribuciones de la policía. Río resolvió que el lunes y martes fueran feriados para descomprimir la circulación. Y muchas áreas de las playas de Leblon, Ipanema y Copacabana fueron cerradas.
En la víspera del G20, manejar por las calles de Río era un incordio. Los choferes de Uber bufaban ante cada redirección forzada, pero rápidamente volvían a su habitual buen humor a prueba de balas. La caída del Real, en cambio, preocupa un poco más a los cariocas.
La moneda brasileña se devaluó casi 20 puntos en lo que va del año. La inflación interanual roza los 5 puntos. El triunfo de Donald Trump y su plan de impulsar un súper dolar empujó un poco más la depreciación de la moneda. Los brasileños, sin embargo, siguen sin pensar en dólares. Los comerciantes locales sólo usan la calculadora para facilitarles la cuenta de la conversión de monedas a los miles de turistas argentinos que pasean (y compran) en la cidade maravilhosa.
Quiénes serán los líderes presentes en la cumbre
El anfitrión Luiz Inácio Lula da Silva recibirá a Joe Biden, Xi Jinping, Claudia Sheinbaum, Javier Milei, Narendra Modi, Emmanuel Macron y Olaf Scholz, entre otros. Algunos serán debutantes en Sudamerica. Los líderes de los países del G20, que juntos representan 85% del PIB global y tres cuartas partes del comercio mundial.
Rusia estará representada por su ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov. Vladímir Putin declinó el convite. La orden de arresto en su contra de la Corte Penal Internacional (CPI), relacionada con la guerra en Ucrania, lo convenció de que era preferible perderse el evento.
El canciller uruguayo Omar Paganini fue invitado especialmente y mantendrá una bilateral clave para los intereses de su país.
Paganini se verá con el nuevo canciller argentino Gerardo Werthein. El gobierno de Luis Lacalle Pou quiere avanzar con la construcción de un puerto en una zona franca en el departamento de Soriano. La obra se realizaría a orillas de la Hidrovía Paraná-Paraguay. Uruguay espera con anisas el guiño desde Buenos Aires.
Alianza entre Lula y un diluido Joe Biden
La agenda que instaló la presidencia brasileña del G20 está basada en la lucha contra el hambre y la pobreza, la reforma de las instituciones internacionales y el desarrollo sustentable. Y aunque varios de los líderes presentes en la cumbre coincidan con esta visión, entre ellos el saliente Joe Biden, el encuentro se da en un momento de tensión geopolítica y cambios, a la espera del last dance trumpista. La figura de DJT será el elefante blanco en cada sala del Museo donde se desarrollará el G20.
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Un Biden diluido tras la derrota de Kamala Harris llega a Río para la cumbre del G20.
AFP
Biden y Lula volverán ahora a verse en Río y sostendrán un encuentro al margen de la cumbre. Pero la figura de Biden se derrumbó tras la derrota de Kamala Harris. La sombra de Trump, con su "America First" y políticas proteccionistas, rondará la cita en el Museo de Arte Moderno.
Admirador de Trump y crítico del multilateralismo, Milei llega al G20 después de que la delegación argentina se retirara abruptamente de la COP29, la cumbre climática de la ONU que se celebra en Azerbaiyán.
"Quisiera señalar que el cambio climático es un desafío importante que los países deben abordar de manera conjunta", aseguró Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, que evadió así una crítica directa el gobierno de Milei, ante la consulta de El Observador USA por la postura argentina en la COP29.
"Bajo la administración Biden, nos hemos comprometido a continuar con nuestros esfuerzos colectivos para combatir el cambio climático, y creemos que la gran mayoría de los pueblos del mundo comparten ese objetivo", añadió ante este medio.
La agenda de Milei en la cumbre
El presidente argentino partió rumbo a Río tras verse con Emanuel Macrón en Buenos Aires. Llegó al anochecer de un día nublado y húmedo en la ciudad brasileña. El lunes, compartirá un almuerzo de trabajo y formarán parte de la tradicional foto de familia de la cumbre.
A las 16:30, Milei se verá con el presidente del Banco Mundial Ajay Banga. El martes protagonizará la parte más fuerte de su agenda. La primera bilateral será a las 10:20 horas con el presidente de la República Popular China Xi Jinping.
A las 11:30, tendrá un cara a cara clave para conseguir dólares. Milei dialogará con la directora del Fondo Monetario Internacional Kristalina Georgieva. Y a las 12 del martes, se juntará con el Primer Ministro de la India Narendra Modi. La última reunión será con el gerente general de la empresa italiana Enel, Flavio Cattaneo
Coincidencias y discrepancias
La lucha contra el cambio climático será motivo de debate en esta cumbre, en la que participan además la Unión Europea y la Unión Africana. El año pasado, en la cita del G20 en India, el grupo se declaró a favor de triplicar las energías renovables de aquí a 2030, pero sin hacer ningún llamamiento concreto para abandonar los combustibles fósiles.
Biden mostrará la importancia que ha tenido el tema climático en su gobierno, pese a haber alcanzado cifras récord de producción de petróleo. Pero el demócrata de 81 años quiere retirarse de la escena con ese premio consuelo. Marcar un fuerte contraste con Trump de forma anticipada.
Lo hará al convertirse en el primer mandatario estadounidense en visitar la selva amazónica. El saliente presidente de EEUU estará en Manaos, donde sostendrá un encuentro con líderes locales e indígenas que trabajan para preservar la región. Y algo más. En sus últimos días en el poder, Biden acaba de darle un regalo de despedida a un Volodomyr Zelensky. Autorizó a Ucrania a utilizar armas estadounidenses de largo alcance en Rusia
Zelensky no se resigna al desenlace que pinta inevitable con Trump en la Casa Blanca. ¿Cuál? ceder parte de su territorio a la Rusia de Putin para terminar la guerra. El republicano electo fantasea con la estretagie de Nixon invertida: acercarse a Rusia para debilitar a China.
