Después de que Matt Gaetz desistiera de su designación por la polémica generada en torno a las investigaciones en su contra, Donald Trump apostó a lo seguro. El presidente electo anunció que Pam Bondi, que en algún momento formó parte de su equipo de defensa, será la próxima fiscal general. La abogada de Florida, que fue a su vez la primera mujer en ser fiscal general en su estado, representa una garantía de lealtad para el republicano y un respaldo a su agenda de mano dura.
"Durante demasiado tiempo, el Departamento de Justicia partidista ha sido utilizado como arma contra mí y otros republicanos. Ya no. Pam volverá a enfocar al DoJ a su propósito original de luchar contra el crimen y hacer que Estados Unidos sea seguro nuevamente", escribió Trump en su red Truth Social al anunciar el jueves su nombramiento.
Bondi, de 59 años, es una aliada de larga data del magnate, al que respaldó ya en las primarias de 2016. En 2020 formó parte del equipo de abogados que lo defendió en el juicio político en el Senado, en el que se lo acusaba de haber intentado presionar al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, para que Kiev investigara al hijo de Joe Biden, su rival en las elecciones presidenciales de ese año, a cambio de una ayuda militar crucial.
La apuesta a la lealtad, como Gaetz
Su designación llega en medio de los temores de que Trump intente perseguir a sus rivales políticos a través de la Justicia e impulse el cierre de las investigaciones en su contra. En ese sentido, es una apuesta por una figura leal similar a la que había hecho con Gaetz, cuya confirmación por parte del Senado fue puesta en duda después de que quedara en el foco de atención por haber estado involucrado en un caso de tráfico sexual de una menor de 17 años.
Matt Gaetz y Donald J Trump Fiscal - Foto de X de Matt Gaetz.avif
“Aunque el impulso era fuerte, está claro que mi confirmación estaba injustamente convirtiéndose en una distracción para el trabajo crítico de la Transición Trump/Vance", dijo el ex congresista por Florida en un comunicado en el que anunció su decisión. "No hay tiempo que perder en una pelea innecesariamente prolongada en Washington, por lo tanto, retiraré mi nombre de consideración para servir como secretario de Justicia. El Departamento de Justicia de Trump debe estar en su lugar y listo desde el primer día", manifestó.
Gaetz se vio involucrado en una serie de investigaciones, entre ellas una del Departamento de Justicia por tráfico sexual. La causa duró tres años y terminó en 2023, cuando el DoJ decidió no presentar cargos. El Comité de Ética de la Cámara de Representantes también lo estuvo investigando desde 2021, por conducta sexual inapropiada con una menor de 17 años, consumo de drogas ilícitas y aceptación de regalos indebidos. El representante renunció a su escaño la semana pasada, después de saber que Trump anunciara que lo iba a postular como fiscal general, poniendo fin al caso.
El ex congresista consideró que Bondi representa una elección "estelar". "Es una litigante probada, una líder inspiradora y una defensora de todos los estadounidenses", dijo en la red social X. "Ella traerá las reformas necesarias al DoJ", aseguró.
Embed - https://publish.twitter.com/oembed?url=https://x.com/mattgaetz/status/1859753489062154581&partner=&hide_thread=false
Una carrera como fiscal en Florida: mano dura y polémica
Bondi fue fiscal general de Florida entre 2011 y 2019 y se convirtió en la primera mujer en ese puesto después de ganar unas peleadas internas republicanas con el apoyo de la ex candidata a la vicepresidencia Sarah Palin y de promocionar su postura dura contra la delincuencia en apariciones en Fox News.
"Pam fue fiscal durante casi 20 años, donde se mostró implacable con los criminales violentos y logró que las calles fueran seguras para las familias de Florida", señaló Trump en un comunicado. "Como la primera fiscal general mujer de Florida, trabajó para detener el tráfico de drogas mortales y reducir la tragedia de las muertes por sobredosis de fentanilo, que han destruido muchas familias en todo nuestro país", añadió.
Durante su mandato, intentó sin éxito derogar la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, conocida como Obamacare, se opuso al matrimonio homosexual y a otros derechos de la comunidad LGBT, apoyó controvertidas medidas contra la migración y abogó por leyes más duras contra el tráfico de personas.
En 2013 se vio envuelta en una polémica después de recibir una donación de 25.000 dólares de parte de Trump mientras su oficina consideraba si se sumaba a Nueva York en una demanda por acusaciones de fraude que involucraban a la Universidad Trump. Bondi nunca se unió a la demanda y tanto ella como el republicano negaron haber cometido alguna irregularidad.
Pam Bondi con Trump - AFP.jpg
AFP
Del cabildeo a la defensa de Trump
Tras dejar el cargo como fiscal, en 2019, Bondi empezó a trabajar como lobbista en la compañía Ballard Partners, de la que era socia Susie Wiles, la jefa de campaña de Trump que será su próxima jefa de Gabinete. Algunos de sus clientes en EEUU fueron General Motors, el comisionado de las Grandes Ligas de Béisbol y un grupo activista cristiano contra la trata de personas.
Y no sólo defendió a Trump en su juicio político, sino que le expresó su apoyo por los casos en su contra y cuestionó al fiscal especial Jack Smith, que acusó al ex mandatario por intentar revertir los resultados de la elección de 2020 con el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 y por el mal manejo de documentos clasificados tras abandonar la Casa Blanca.
Fue además una de las republicanas que desfiló por Nueva York durante el juicio que se le siguió al magnate inmobiliario por el pago de soborno a la actriz porno Stormy Daniels, por el que fue declarado culpable en mayo. Bondi es además presidenta del America First Policy Institute, un think tank conservador fundado por antiguos miembros del personal de Trump.