La decisión fue tomada por la jueza de distrito Ana C. Reyes. Nacida en Montevideo, Uruguay, Reyes tiene 50 años, es abiertamente homosexual y se hizo fama de implacable. Si bien fue nominada por la administración de Joe Biden y asumió en 2023, la jueza latina señaló la doble vara aplicada por los demócratas. Se quejó por la "hipocresía" de acelerar casos contra ex funcionarios de Trump en comparación con las causas trabadas contra Hunter Biden, el hijo del presidente.
Hay alrededor de 1,3 millones de personas en el servicio militar. Según el Departamento de Defensa, 4.240 miembros del servicio activo, menos del 1% de las fuerzas, tienen disforia de género. Así se lo confirmó el gobierno a NPR. Pero otras fuentes estiman un número más alto.
En 2018, había aproximadamente 14.000 personas trans en las Fuerzas Armadas, según el Palm Center, un instituto independiente que se dedica a investigar sobre las minorías sexuales en el Ejército.
Pete Hegseth secretario de Defensa de Trump hablando en el Capitolio 21 de noviembre (Reuters).jpg
Pete Hegseth, el Secretario de Defensa de los Estados Unidos que implementó las políticas cuestionadas por la jueza Reyes.
Los argumentos del fallo contra Trump
En un fallo con fuertes críticas a la medida de Trump, Reyes argumentó que la prohibición violaba los derechos constitucionales de las tropas transgénero. "La cruel ironía es que miles de miembros transgénero del servicio se han sacrificado, algunos arriesgando sus vidas, para garantizar a otros los derechos de protección iguales que la prohibición militar busca negarles", escribió Reyes.
En una resolución de tono mordaz, la jueza dijo que la administración republicana no debe cumplir la veda contra personas trans, programada para entrar en vigor a finales de este mes. Escribió que la prohibición "está empapada de 'animus' pretextos". Reyes agregó: "Su lenguaje es descaradamente degradante, su política estigmatiza a las personas transgénero como inherentemente no aptas, y sus conclusiones no tienen relación con los hechos".
Trump se comprometió a acatar las decisiones judiciales, diciendo que se limitaría a apelar. Pero eso no lo inhibió de ser abiertamente crítico contra los jueces federales que resolvieron en su contra. Eso le valió una inesperada tensión con la Corte Suprema de Justicia.
"El Presidente tiene el poder, de hecho, la obligación, de garantizar la preparación militar", escribió la uruguaya. "A veces, sin embargo, los líderes han utilizado la preocupación por la preparación militar para negar a las personas marginadas el privilegio de servir", concluyó de forma fulminante.
Uruguaya, LGBTQ+ y amante de los perros
La decisión de la jueza montevideana fue celebrada por Glad Law, uno de los dos grupos legales LGBTQ+ que representan a los demandantes en el caso. "El fallo decisivo de hoy dice mucho", dijo Jennifer Levi, directora senior de Derechos Transgénero y Queer de GLAD Law.
"Las conclusiones objetivas e inequívocas de la jueza dejan al descubierto cómo esta prohibición se dirige y socava específicamente a nuestros valientes miembros del servicio que se han comprometido a defender nuestra nación", elogió.
Ana Reyes es la primera latina y persona abiertamente LGBTQ+ en ejercer como jueza de la corte de distrito en Washington DC. Su trayectoria y ascenso parece un cuento de hadas sobre el american dream.
El emotivo reencuentro con quien le enseñó inglés
Nació en 1974 en Montevideo. Se mudó con su familia a España y luego a Louisville, Kentucky, cuando era chica. En 1979 Reyes tenía 5 años. Cuando llegaron a EUU por el trabajo de su padre como ingeniero civil, ella comenzó la escuela. Pero tenía una limitación inmensa: no podía hablar ni leer una palabra de inglés. Empezó a retrasarse en clase.
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Reyes a los 5 años, apenas llegada a EEUU, no hablaba ni una palabra en inglés. Pero una maestra la ayudó y se reencontraron 40 años después.
"Recuerdo sentirme perdida", le contó Reyes al Washington Post. La hoy jueza se encontraba a la deriva hasta que recibió una oferta inesperada: la maestra de primer grado llegaba a la escuela una hora antes cada mañana para darle una lección individual de inglés.
"Eso cambió mi vida", recordó Reyes ante ese diario. Más de 40 años después, en 2020, la abogada ya se destacaba en la firma Williams & Connolly. Era codirectora del grupo de disputas internacionales. Trabajaba pro bono, representando a organizaciones de refugiados y desafiando las regulaciones contra el asilo.
En ese momento se decidió a buscar a su maestra para agradecerle. El nombre de la mujer que la ayudó 4 décadas atrás es Pat Harkleroad. Pero Reyes no recordaba bien el nombre. Tras una intenso cruce de mails pidiendo pistas sobre su maestra, Reyes la ubicó y se reecontraron. El Washington Post registró la emotiva reunión. "Su pequeña mente era como una esponja", dijo la maestra ya jubilada.
"Cuando discuto en la Corte, no me pongo nerviosa, pero por alguna razón conduciendo a su casa, lo estaba", admitió Reyes. "Sentía una gratitud abrumadora, y también un poco de alivio, porque finalmente pude agradecerle", relató.
Reyes a su vez trabajó para Feminist Majority Foundation. Hizo campaña para prohibir que las instituciones gubernamentales estatales de California consideraran a la raza, el género o la etnia como criterio de contratación en el empleo público.
Tras graduarse con honores en la Universidad de Transilvania, en Kentucky, asistió a la Facultad de Derecho de Harvard. Ahí se convirtió en Jurista Doctor, magna cum laude.
Reyes es conocida por llevar a su perro Golden Retriever, de nombre Scout, a su juzgado en la capital de EEUU.
Nominación de Biden y críticas a los demócratas
En mayo de 2022, el presidente Biden nominó a Reyes para el puesto de jueza en Washington. Tras un engorroso proceso de audiencias, su nominación fue confirmada en una votación ajustada en el Senado. Su pliego fue aprobado por 51 votos contra 47. La abogada uruguaya asumió con 48 años en febrero de 2023.
Ya en su cargo, criticó al Departamento de Justicia del gobierno de Biden. Lo hizo en el Comité de la Cámara de Representantes en abril de 2024. Acusó de hipocresía a la administración demócrata por enjuiciar y encarcelar al funcionario de la administración Trump, Peter Navarro, señalando por no cumplir con las citaciones del Comité. Señaló que no se seguía el mismo criterio en la investigación de Hunter Biden y las citaciones emitidas por los republicanos de la Cámara.
En enero de 2024, Reyes sentenció a quien filtró las declaraciones de impuestos de Trump y otros contribuyentes ricos a los medios de comunicación. Lo condenó a cinco años de cárcel, argumentando que se trataba de un "ataque a nuestra democracia".
El mes pasado, ya con Trump en la Casa Blanca, Reyes le dio otra inesperada victoria al gobierno. Les negó la reincorporación inmediata a ocho inspectores generales despedidos por el presidente. Rechazó que el pedido representara una emergencia y los acusó de haber desperdiciado el limitado tiempo de la corte.