El fiscal general, Merrick Garland, denunció el uso de influencers estadounidenses por parte de medios vinculados al gobierno ruso para promover mensajes pro-Kremlin e influir en las elecciones, que se celebrarán en dos meses. Los influencers conservadores, con millones de seguidores en redes sociales, aseguraron que fueron "engañados" y se consideraron "víctimas".
Entre las acciones tomadas, se incluyen sanciones, acusaciones y la incautación de dominios web que, según funcionarios estadounidenses, son utilizados por Rusia para difundir propaganda y desinformación sobre varios temas, entre ellos Ucrania, país que invadió hace más de dos años.
El Departamento de Justicia imputó además a dos empleadas de RT, el canal estatal ruso, que habrían operado una empresa en Tennessee para distribuir contenido. La acusación no menciona el nombre de la compañía, pero la describe como una firma de creación de contenidos con seis presentadores y un sitio web que se identifica como “una red de comentaristas heterodoxos que se centran en cuestiones políticas y culturales occidentales”.
Medios como The Guardian y The New York Times aseguran que esa descripción es idéntica a la que hace Tenet Media en su sitio web. Según la acusación oficial, la firma estadounidense publicó videos en inglés en TikTok, Instagram, X y YouTube y "nunca les reveló a los influencers ni a sus millones de seguidores sus vínculos con RT y el gobierno ruso",
Los casi 2.000 videos publicados por la empresa han recibido más de 16 millones de visitas solo en YouTube, dijeron los fiscales.
Los influencers que publicaron videos con esa compañía online son los conservadores Benny Johnson, Dave Rubin y Tim Pool. "Si estas acusaciones resultan ciertas, yo, así como las otras personalidades y comentaristas, fuimos engañados y somos víctimas", dijo Pool en una publicación en la red social X.
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Rubin dijo en X que "no sabía absolutamente nada sobre ninguna de estas actividades fraudulentas" y que las acusaciones mostraban que él y otros comentaristas fueron "víctimas de este plan".
Quiénes son Pool, Rubin y Johnson
En la web de la empresa de Tennessee se describen los perfiles de los influencers. De Tim Pool, por ejemplo, se dice que es un presentador de podcast que vive en Virginia. Tiene 402.000 seguidores en Instagram y más de un millón en YouTube. "Tras establecerse como periodista de prestigio, cubrió acontecimientos relacionados con disturbios civiles en todo el mundo, por lo que recibió un premio Shorty Award como 'Mejor periodista en redes sociales' en 2013".
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Pool también ha lanzado su propia empresa de medios de comunicación, "que cuenta con una sala de redacción completa y varios programas, entre ellos Pop Culture Crisis, Culture War y el popular Timcast IRL". Además, su última serie, "Culture War", presenta debates y discusiones sobre temas sociales y culturales con invitados de todo el espectro político.
Dave Rubin, con 441.000 seguidores, es un comediante y personalidad televisiva que figura en la lista de best-sellers del New York Times y es conocido por sus comentarios políticos. "Es el presentador de The Rubin Report, un programa de entrevistas de primer nivel con más de 1.000 millones de vistas y millones de suscriptores. The Rubin Report es reconocido como uno de los espacios más influyentes para conversaciones sinceras sobre política, temas polarizantes, eventos actuales y más", dice el sitio web de la compañía.
Benny Johnson, por su parte, tiene un programa en redes sociales llamado The Benny Show, que se transmite en vivo desde Florida para sus millones de seguidores todos los días. Este presentador, que tiene 1,6 millones de seguidores en Instagram, presentó anteriormente The Benny Report en Newsmax TV y ocupó puestos editoriales en The Daily Caller, IJR, National Review, TheBlaze y BuzzFeed.
La respuesta de RT y de Rusia
RT reaccionó a través de su canal en Telegram y desestimó las acusaciones de Estados Unidos, a las que calificó como "trillados clichés". "Tres cosas son inevitables en la vida: la muerte, los impuestos y la 'interferencia de RT en las elecciones estadounidenses'", ironizó el medio.
La portavoz del Ministerio ruso de Exteriores, Maria Zajarova, cuestionó la decisión de Estados Unidos en una entrevista con la agencia Ria Novosti ."Evidentemente se trata de una operación, de una campaña de información (...) preparada de hace tiempo y que resulta necesaria ahora que se acerca la última fase del ciclo electoral", comentó.
La diplomática afirmó que Moscú, "evidentemente", prepara una respuesta a esas nuevas sanciones, que hará "temblar a todo el mundo" a dos meses del duelo electoral en Estados Unidos entre Donald Trump y Kamala Harris.
Los funcionarios estadounidenses dicen que las tácticas de Rusia han evolucionado desde 2016, incluso cuando sus intenciones siguen siendo en gran medida las mismas.