El anuncio tuvo lugar el martes en la Casa Blanca, donde Trump estuvo acompañado por altos ejecutivos de empresas líderes del sector, como Larry Ellison (Oracle), Sam Altman (OpenAI) y Masayoshi Son (SoftBank). El proyecto pretende establecer una red de infraestructuras físicas y virtuales para impulsar el desarrollo de tecnologías avanzadas de IA.
"Esta compañía monumental es una rotunda declaración de confianza en el potencial de Estados Unidos bajo un nuevo presidente", dijo el republicano, un día después de su investidura para un segundo mandato.
Según el mandatario, la inversión generará más de 100.000 puestos de trabajo nuevos en Estados Unidos en los próximos cuatro años, en los que se espera que alcance los 500.000 millones de dólares previstos. En principio, las empresas aportarán 100.000 millones de dólares.
Objetivos y alcance del proyecto Stargate
Según las declaraciones de Trump, Stargate tiene como objetivo posicionar a Estados Unidos como líder mundial en el desarrollo de inteligencia artificial, en respuesta a la creciente competencia internacional.
El proyecto contempla la creación de centros de datos colosales, capaces de procesar las enormes demandas de cómputo de los modelos de IA actuales y futuros. Además, se espera que la iniciativa facilite el acceso a recursos tecnológicos de alto rendimiento para empresas, instituciones académicas y agencias gubernamentales.
Las empresas líderes en IA vienen advirtiendo desde hace meses sobre la necesidad de contar con más centros de datos. "Creo que éste será el proyecto más importante de esta era", declaró Altman el martes. "No podríamos hacerlo sin usted, señor presidente", señaló, según recogió la cadena CNN.
Stargate también apunta a garantizar la soberanía tecnológica estadounidense, reduciendo la dependencia de infraestructuras extranjeras y potenciando el desarrollo de nuevas aplicaciones en sectores clave como la salud, la defensa y la economía digital. El CEO de OpenAI había instado a las autoridades a generar mayor infraestructura para que Estados Unidos no se quede atrás en la guerra por la IA frente a China.
Los actores clave detrás de Stargate
El megaproyecto cuenta con la participación de importantes empresas tecnológicas que aportarán financiamiento y capacidades operativas. Entre los socios principales se encuentran:
SoftBank, que asumirá la responsabilidad financiera y liderará la gestión del capital necesario para la ejecución del proyecto.
OpenAI, que tendrá la responsabilidad operativa, supervisando el desarrollo de los centros de datos y la implementación de tecnologías avanzadas.
Oracle, que brindará soluciones de infraestructura en la nube y almacenamiento de datos.
Otros socios tecnológicos involucrados incluyen a Microsoft, NVIDIA, Arm y MGX, que aportarán sus conocimientos en hardware, software e inteligencia artificial.
Infraestructura, ubicaciones estratégicas y desafíos
La construcción de los primeros centros de datos de Stargate ya está en marcha en el estado de Texas, una ubicación elegida por su acceso a fuentes de energía y su infraestructura tecnológica existente.
El proyecto también contempla la expansión a otras regiones estratégicas del país, con el fin de garantizar una distribución equitativa de recursos tecnológicos en todo el territorio estadounidense. Actualmente, se están evaluando varias ubicaciones adicionales para la instalación de nuevos centros de datos.
El crecimiento exponencial de la IA ha generado una demanda sin precedentes de capacidad de cómputo y consumo energético, lo que representa un reto para la sostenibilidad del proyecto.
Stargate busca abordar este desafío mediante la inversión en tecnologías de energía renovable y la optimización de la eficiencia de los centros de datos. Sin embargo, expertos señalan que la infraestructura energética del país podría no ser suficiente para soportar la magnitud de este proyecto sin una significativa expansión.
El impacto de la desregulación de la IA en EEUU
El lanzamiento de Stargate coincide con la revocación de la orden ejecutiva sobre IA firmada por el expresidente Joe Biden en 2023, que establecía medidas de supervisión para las empresas que desarrollaban modelos de IA de alto impacto.
La orden ejecutiva exigía que las compañías notificaran al gobierno sobre desarrollos en IA que pudieran afectar la seguridad nacional, la economía o la salud pública. También imponía normas para mitigar sesgos y discriminación en los sistemas de IA.
Además, la normativa incluía disposiciones para proteger la privacidad, reforzar los derechos civiles, y promover la innovación responsable. El texto también obligaba al etiquetado claro de contenido generado por IA para prevenir fraudes y engaños, una medida que había sido bien recibida por ciertos sectores de la sociedad civil.
Durante su campaña, Trump criticó duramente las regulaciones impuestas por Biden, calificándolas como un freno innecesario. La decisión de Trump de revocar estas regulaciones fue tomada horas después de haber asumido.
