Estados Unidos enfrenta este 2025 tres brotes de sarampión con casos reportados en 12 estados y muertes confirmadas de un niño y un adulto no vacunados.
En el oeste de Texas, se contabilizaron 223 trasmisiones, según la actualización del martes del Departamento de Servicios de Salud local, 25 casos más que el viernes. Por su parte, el Departamento de Salud de Nuevo México informó también 33 casos hasta el martes, tres más que la semana pasada.
"Consideramos que se trata de un brote regional de sarampión que ha sido vinculado geográficamente y por la cepa identificada a través de la secuenciación del genoma”, explicó el director de comunicaciones del Departamento de Salud de Nuevo México, Robert Nott.
Según informes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el 94% de los casos se identificaron en personas no inmunizadas; el 80% de los casos actuales son niños menores de 19 años, de acuerdo a la información brindada por la profesora clínica especializada en pediatría en la Escuela de Enfermería de Rutgers, Margaret Quinn, en diálogo con Rutgers.edu.
Se reportaron al menos 222 casos en 12 estados, incluidos Alaska, California, Florida, Georgia, Kentucky, Nueva Jersey, Nuevo México, Nueva York, Pensilvania, Rhode Island, Texas y Washington.
Con las últimas cifras, los contagios de sarampión en 2025 ya se están acercando al total de 285 casos del año pasado en Estados Unidos.
¿Qué es el sarampión?
El sarampión es una enfermedad respiratoria grave causada por un virus altamente contagioso. Se transmite fácilmente a través de la tos y los estornudos de personas infectadas.
¿Cuáles son los síntomas del sarampión?
Los síntomas iniciales del contagio de sarampión incluyen fiebre alta, tos, secreción nasal y ojos enrojecidos y llorosos. Posteriormente, aparece un sarpullido de puntitos rojos que comienza en la cabeza y se extiende al resto del cuerpo.
El sarpullido puede durar una semana y la tos puede persistir durante 10 días. En algunos casos, puede también provocar complicaciones graves, como neumonía, daño cerebral, sordera permanente e incluso la muerte.
¿Cómo prevenir los contagios de sarampión?
La vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubéola (MMR, por sus siglas en inglés) proporciona una protección duradera contra todas las cepas del virus.