Para la excanciller alemana, el arribo del dueño de Tesla al futuro gobierno de Donald Trump lesionará el "equilibrio social entre los poderosos y los ciudadanos comunes".
La excanciller de Alemania Angela Merkel expresó su "enorme preocupación" por el papel que desempeñará el empresario Elon Musk en el próximo gobierno de Donald Trump.
A poco más de tres años de su salida de la primera magistratura germana y en el marco de la presentación de sus memorias, Merkel alertó por la existencia de "una alianza visible" entre el republicano y las grandes empresas de Silicon Valley.
"Ahora hay una alianza visible entre él y las grandes empresas de Silicon Valley que tienen un enorme poder a través del capital”, apuntó en diálogo con la revista Der Spiegel.
Las definiciones de la elegida "Personaje del año" por la revista Time en 2015 se dieron semanas después de que el propio presidente electo de Estados Unidos confirmara la coalición con Musk para comandar el Departamento de Eficiencia Gubernamental junto al empresario Vivek Ramaswamy.
"Brindará asesoramiento y orientación desde fuera del gobierno y se asociará con la Casa Blanca y la Oficina de Administración y Presupuesto para impulsar reformas estructurales a gran escala y crear un enfoque empresarial para el gobierno nunca antes visto”, anticipó el magnate sobre el dueño de Tesla y la red social X (exTwitter).
La excanciller alemana enfatizó en que los "enredos financieros" del jefe de SpaceX y Tesla hacen que tal nombramiento "sea altamente problemático".
“Si una persona como él es dueña del 60% de todos los satélites que orbitan en el espacio, eso debe ser una gran preocupación para nosotros, junto con las cuestiones políticas”, afirmó. “La política debe determinar el equilibrio social entre los poderosos y los ciudadanos comunes”, amplió.
En la misma línea, Merkel repasó como en la crisis financiera de 2007-2008, durante su primer mandato, “la esfera política fue la autoridad final que podía arreglar las cosas” con medidas como rescates.
"Y si esta autoridad final está demasiado influenciada por las empresas, ya sea a través del poder del capital o de las capacidades tecnológicas, entonces será un desafío sin precedentes para todos nosotros", sumó la excanciller.
Según ella, uno de los parámetros que distinguen a las sociedades libres es el control claro del poder corporativo y de la influencia de los ultrarricos. “En una democracia, la política nunca es impotente frente a las empresas”, agregó.
Al ser consultada por las redes sociales, Merkel instó a "contrarrestar el furor", ya que, de lo contrario, provocaría fenómenos como la AfD en su país, refiriéndose al partido de extrema derecha Alternative für Deutschland.
La excanciller alemana comentó también que el presidente electo de los Estados Unidos estuvo "fascinado por el poder absoluto" durante su primera gestión, entre 2017 y 2021, de hombres como el presidente ruso, Vladimir Putin, y el líder norcoreano, Kim Jong Un.
“La forma en que hablaba de Putin, la forma en que hablaba del (líder) norcoreano –obviamente aparte de los comentarios críticos que hacía– siempre había una especie de fascinación por el poder absoluto de lo que esta gente podía hacer”, sentenció Merkel durante una entrevista con la cadena CNN.
