La idea de vivir en una territorio donde no exista la religión, la política, ni el dinero en efectivo podría parecer algo utópico para los tiempos modernos. Sin embargo, en febrero de 1968 lo que parecía imposible tomó forma en el distrito de Viluppuram, India, bajo el nombre de Auroville
También apodada la "Ciudad universal" o "Ciudad del amancer", se configuró como un municipio experimental. Impulsado por Mirra Alfassa (conocida como "La Madre") y diseñada por el arquitecto Roger Anger, tras la muerte de la primera en 1973, el distrito se desarrolló, en medio del desierto, gracias al trabajo de sus habitantes.
En la actualidad viven en Auroville unas 3301 personas de 60 países diferentes. La mitad provenientes de la India y una quinta, francesa.
Cómo nació Auroville, la única ciudad del mundo donde no existe la religión, la política, ni el dinero en efectivo
En la Conferencia Anual de 1964 y con Mirra Alfassa como su Presidenta Ejecutiva, la Sociedad Sri Aurobindo en Pondicherry aprobó una resolución para el establecimiento de una ciudad dedicada a la visión de Sri Aurobindo: la realización espiritual del hombre que no sólo libera la conciencia sino también transformar su naturaleza.
Alfassa esperaba que esta "Ciudad universal" experimental contribuiría significativamente al "progreso de la humanidad hacia su espléndido futuro al reunir a personas de buena voluntad y aspiraciones a un mundo mejor". También creía que su emplazamiento contribuiría decisivamente al Renacimiento indio.
"Auroville quiere ser una ciudad universal donde los hombres y mujeres de todos los países puedan vivir en paz y armonía progresiva, por encima de todos los credos, todas las políticas y todas las nacionalidades. El objetivo de Auroville es realizar la Unidad Humana", enfatizó "La Madre" en su primer mensaje de presentación.
La ceremonia inaugural se llevó a cabo el 28 de febrero de 1968, a la que asistieron delegados de 124 naciones. Allí se especificaron los cuatro puntos fundacionales respecto a la visión de la vida integral a llevar a cabo en el territorio:
- Auroville no pertenece a nadie en particular. Auroville pertenece a la humanidad en su conjunto. Pero para vivir en Auroville, uno debe ser un servidor voluntario de la Conciencia Divina.
- Auroville será el lugar de una educación sin fin, de un progreso constante y de una juventud que nunca envejece.
- Auroville quiere ser el puente entre el pasado y el futuro. Aprovechando todos los descubrimientos externos e internos, Auroville se lanzará con valentía hacia las realizaciones futuras.
- Auroville será un lugar de investigaciones materiales y espirituales para la encarnación viva de una unidad humana real.
En los primeros 20 años, alrededor de 400 personas de 20 países residieron en el municipio. En los siguientes 20, el número aumentó a 2000 de 40 países. A diciembre de 2024, la "Ciudad universal" contabilizó 3301 residentes (2668 adultos y 633 niños) de 60 naciones, con alrededor del 50% de la India y casi el 20% de Francia y Alemania.
El objetivo es albergar a 50.000 habitantes. Para hacerlo realidad, los vecinos de Auroville pidieron al Gobierno indio 120 millones de euros en un intento por rejuvenecer la utopía. Solo alrededor de 100 personas se instalan en Auroville cada año, en busca de espiritualidad y valores ecológicos.
En su centro se encuentra el Matrimandir, el "Alma de la ciudad", un lugar de concentración individual y silenciosa, en una zona de paz de forma ovalada rodeada por un lago. Más allá de este punto, se extienden cuatro zonas: la industrial (norte), la cultural (noreste), la residencial (sur/suroeste) y la internacional (oeste).
Cada una se centra en un aspecto importante de la vida de la ciudad. Alrededor del municipio se prevé construir un cinturón verde formado por zonas forestales, granjas y santuarios.