La contratación de Peñarol del volante Marco Oroná tuvo un nuevo e inesperado giro. Después de firmarle vínculo por una temporada, el martes de la semana pasada, y de inscribirlo en la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), los aurinegros se encontraron con una complicación de último momento.
El presidente Ignacio Ruglio logró con el representante del jugador un acuerdo para sumar a Marco Oroná como un jugador de proyección para el plantel.
Sin embargo, la alianza que se generó en el consejo directivo de Peñarol entre el bloque conformado con Evaristo González, Guillermo Varela, Santiago Sánchez, Rodolfo Catino y Nicolás Ghizzo con Edgardo Novick, frenó esa contratación.
Por esa razón, Rodolfo Catino, secretario general de Peñarol desde el 21 de enero, no puso la firma del contrato hasta que no se generaran nuevas condiciones.
El contrato es válido con la firma del jugador pero de parte del club se necesitan las rúbricas del presidente y del secretario general.
Inicialmente, Ruglio había acordado un contrato anual de US$ 45 mil para el jugador y la alianza pidió que se le firmara un contrato de juvenil, habida cuenta de que Oroná no se sumó al club como un futbolista de Primera.
Finalmente se acordó un contrato anual que rondará los US$ 15 mil.
Además, Peñarol pretendía quedarse con el 70% de la ficha del jugador cuando inicialmente Ruglio había acordado solo un 30% para el club.
Recién ahí se firmó el contrato del jugador y posteriormente se inscribió a tiempo en la AUF, el 25 de febrero, día en que vencía el plazo para inscribir futbolistas libres.
Los jugadores con pase de club a club debían ser inscriptos el jueves 30 de enero.
¿Qué pasó con el contrato de Marco Oroná?
El fin de semana, en Peñarol se desayunaron de que el jugador tuvo que pedir pase desde Universidad de Chile donde tenía un contrato de juvenil.
El jugador, volante de 19 años y convocado por Marcelo Bielsa para la doble fecha de Eliminatorias para el Mundial de octubre de 2024 donde Uruguay enfrentó a Perú y Ecuador (no llegó a ir al banco), no llegó entonces a Peñarol en condición de libre.
Universidad de Chile rechazó una oferta de US$ 500 mil para comprar el 80% de su ficha y por esa razón, Castro decidió sacarlo del club y ofrecérselo a Peñarol.
Como el jugador llegó con el torneo de Tercera ya empezado y el pase internacional se inscribió después del inicio del certamen, no podrá jugar en esa divisional. Deberá esperar a que se abra el nuevo período de pases a mitad de año.
En cambio, ese contrato, por ser de juvenil, no influye para que Oroná pueda jugar en Primera División. En este caso, al ser anotado el 25 de febrero, cuenta como jugador libre y podrá ser utilizado por Diego Aguirre, siempre y cuando este así lo entienda conveniente.
Aguirre fue consultado una sola vez por el tema y declaró a un medio radial que Oroná es un jugador que no fue pedido por él pero que él dio su "consentimiento" avalando su arribo.
También destacó sus cualidades humanas, manifestó en torno a la polémica que se generó entre el oficialismo de Ruglio y la alianza, que Peñarol tenía "prioridades" más importantes para estar enfocado y dejó en claro que Oroná es una "apuesta a futuro" como "tantos juveniles" que hay en la cantera de Peñarol.
Es decir que para Aguirre no es un jugador que llegó con la posibilidad de sumarse inmediatamente al plantel de Primera, más allá de que en la zona media perdió a un juvenil del club como Tomás Olase, por rotura de ligamentos.
Aguirre ya tiene igualmente cubierta la zona media con Rodrigo Pérez, el argentino Eric Remedi que llegó de San Lorenzo, Eduardo Darias, Ignacio Sosa y Germán Barbas, que estuvo en el arranque del año disputando el Sudamericano sub 20.
Además, el DT define por estas horas el futuro de Franco "Cepillo" González quien rescindió su préstamo en Yverdon de Suiza y ya lleva un par de meses en el club donde completó la recuperación de una lesión y ahora busca definir su futuro.
Con este panorama, es probable que Oroná, que ya lleva más de un mes entrenando en Peñarol, siga entrenando en Tercera esperando quedar habilitado para mitad de año.
"El representante del jugador tuvo la contraoferta de Peñarol durante casi un mes arriba de la mesa. Si hubieran entendido antes que era la única forma de llegar a Peñarol con esas nuevas condiciones, quizás se hubiera firmado e inscripto a tiempo", se informó a Referí desde el consejo directivo del club.
