El partido que River Plate le ganó este martes a Rampla Juniors en el estadio Olímpico Pedro Arispe, por la 13ª fecha del Torneo Clausura, estuvo marcado por un hecho muy particular.
En determinado momento del segundo tiempo, un perro irrumpió en el terreno de juego.
El can se paseó por el área custodiada por el golero Yonathan Irrazábal y el juez Pablo Giménez no detuvo las acciones.
El animal no se asustó con el centro ni con los despejes de Christian Almeida ni Horacio Salaberry y prosiguió su marcha.
Irrazábal, todo un profesional, nunca desatendió la jugada pese a que el perro le pasó por al lado cruzando la cancha de izquierda a derecha.
Cosas del pintoresco fútbol uruguayo donde en mayo de este año, se vio una oveja en la tribuna del Parque Paladino, escenario de Progreso, y un mes después, un gol de Sebastián Fernández de Danubio, dio vuelta al mundo porque en la tribuna del franjeado un perro marrón corrió festejando el gol.