El domingo a última hora ya se sabía que el líder de Identidad Soberana, Gustavo Salle, entraría al Parlamento como el principal diputado de su partido. Como obtuvo más de 64 mil votos, accedió a una segunda banca, aunque todavía no estaba claro quién la iba a asumir.
Consultado por El Observador, Salle dijo que la decisión del partido fue que él asumiera la banca por Canelones y que su hija, que es su suplente en la mayoría de los departamentos, asumiera la titularidad en Montevideo.
De este modo queda afuera Alejandra Carro, que era la segunda en la lista de Montevideo y una de las principales opciones para asumir.
El departamento en el que Identidad Soberana votó mejor fue en Maldonado, donde obtuvo 3,6% de los votos válidos. Le siguió Rocha, con 3,5%, y después Montevideo y Soriano, en los dos casos con 3,2% de los votos válidos.
La mayor votación la obtuvo en Montevideo (27.061), seguido por Canelones (10.385) y Maldonado (4.627).
Nicolle Salle (40) es odontóloga y ha sido el puntal de su padre en cuanto a los temas vinculados con el covid-19. El movimiento de Salle ha tenido su mayor visibilidad durante la pandemia por posicionarse en contra de la vacunación. Trabajó en la cátedra de farmacología de la Facultad de Medicina y, durante un posgrado en Odontología Social, un docente invitado fue el que le "le mostró los verdaderos datos sobre las inoculaciones", que llevaban a razonar que las vacunas no tienen efectos inmunitarios. Esa teoría está desarrollada en el libro de la doctora y académica estadounidense Suzanne Humphries, Desvaneciendo ilusiones.
Nicole Salle se diferencia de su padre en el tono, aunque no en las ideas. “Mi idea es tratar de dialogar en buenos términos, no es trancar por trancar, vamos a apoyar todo lo que sea bueno de la ciudadanía”, dijo a El Observador previo a conocerse los resultados electorales.
Para los Salle, la pandemia fue “una operación psicológica gestada” y César Vega “no planteó bien” el tema, como por ejemplo cuando llevó a mujeres al Parlamento para mostrar que se le pegaban las cucharas en el cuerpo y sostener que eso estaba asociado con los metales de la vacuna contra el covid-19.
La militancia de Nicolle Salle contra las vacunas es tal que su hijo no recibió ninguna inoculación y hace la escuela en su casa.
"Esta es la triste nueva normalidad, sepan que quienes se inocularon son bombas de tiempo. Han destrozado la salud de billones de personas y ahora a lidiar con las consecuencias", escribió hace cuatro días en su cuenta de Facebook, junto con el video del ómnibus de Cutcsa que bajó a contramano por avenida Brasil a toda velocidad y terminó en la playa. Después de publicada esta nota, el posteo fue cerrado.
Además, Nicolle Salle fomenta la bioconstrucción. La casa en la que vive la hizo ella misma, de barro.
Fue suplente de su padre en todas las listas, y segunda en algunos departamentos del interior. Ella será la que esté arriba de los temas vinculados con la salud: la no obligatoriedad del carné de salud para trabajar, la no obligatoriedad de la mamografía —porque considera que sus radiaciones implican "riesgos para la salud"—, o exponer sobre los “falsos positivos” que dice que da el resultado del PAP. Y, sobre todo, estar en alerta ante las decisiones vinculantes que dé la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La hija solo tiene matices con el padre en dos cuestiones: en las formas de exponer las discusiones, y en la ideología de género. Nicolle Salle está de acuerdo con militar contra la hormonización en niños y con que desde las escuelas fomenten o alienten afirmaciones de género cuando los menores todavía no tienen su identidad formada. Más allá de eso, en el resto del tema ella se describe como más tolerante que el padre. “Para él, este (la ideología de género) es un tema tabú”, contó.
En cualquier caso, si entran los dos al Parlamento, habrá dos votos Salle. "Podría ser que vote distinto, pero sería una situación muy remota", dice Salle, el padre.
"Es la persona con la que tengo más confianza en el planeta. Es una tranquilidad para mí, si me pasa algo, poder devolver el préstamo", agrega.
Se refiere a los US$ 200 mil reembolsables que pidió prestados a sus compañeros de militancia para esta campaña electoral, y que devolverá cuando cobre lo que le dará la Corte Electoral por cada voto. Sobre el resto del dinero (en total obtendrá alrededor de US$ 800 mil), una parte será administrado por el partido y otra parte dice que será administrada por él de forma particular.