Los soldados del Ejército de la República Democrática del Congo (RDC) y sus milicias aliadas se retiraron este miércoles de la estratégica ciudad de Goma, en el este del país, y se refugiaron en el territorio vecino de Nyiragongo, frente al avance del grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23).
"Numerosos soldados de la FARDC (Fuerzas Armadas de la RDC) y combatientes Wazalendo (milicias afines al Ejército congoleño) se están retirando gradualmente de la ciudad de Goma y se dirigen hacia el territorio de Nyiragongo", aseguró a EFE un testigo -que prefirió permanecer en el anonimato- cerca del aeropuerto internacional de Goma, capturado el martes por el M23 y donde ahora reina una calma precaria.
"Los rebeldes del M23 ya han tomado el control de varios puntos estratégicos de la ciudad, incluido el aeropuerto, el puerto, el monte Goma y el museo de Himbi, donde se encuentra la oficina del gobernador provincial", añadió.
A lo largo de la mañana, se escucharon varias detonaciones esporádicas de armas de fuego en diversos barrios al norte de Goma, la capital de la provincia congoleña de Kivu del Norte, en lo que constituye el cuarto día consecutivo de combates en la ciudad.
Aunque todavía no se han difundido cifras oficiales del número de muertos y heridos, los tiroteos entre el Ejército congoleño y el M23, así como el uso de artillería pesada en zonas residenciales y densamente pobladas, están dejando muchos cadáveres en las calles de Goma, afirmaron el martes portavoces de organismos humanitarios de la ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Varios barrios de la ciudad continúan sin agua ni electricidad desde el pasado viernes, pues las líneas eléctricas que suministran energía a Goma fueron dañadas por bombardeos durante los combates en las rutas de Rutshuru y Minova.
Además, las actividades socioeconómicas aún no se han reanudado y tiendas, mercados y otros comercios siguen cerrados, mientras que la circulación es casi inexistente y sólo varios curiosos han acudido a las principales avenidas de la capital para observar la evolución de la situación.
El lunes, los rebeldes del M23 -un grupo armado formado principalmente por tutsis que sufrieron el genocidio ruandés de 1994- tomaron la estratégica ciudad de Goma después de varios días de intensos enfrentamientos con el Ejército congoleño y sus milicias aliadas.
Esta escalada del conflicto ha generado un aumento de la tensión con la vecina Ruanda, ya que el Gobierno de la RDC acusa a Ruanda de apoyar al M23, un extremo que ha confirmado la ONU.
Por su parte, Ruanda y este grupo rebelde acusan al Ejército congoleño de cooperar con las FDLR, un grupo fundado en 2000 por cabecillas del genocidio de 1994 y otros ruandeses exiliados para recuperar el poder político en su país, una colaboración que también ha sido confirmada por la ONU.
La actividad armada del M23 se reanudó en noviembre de 2021 con ataques relámpago contra el Ejército congoleño en Kivu del Norte, y desde entonces ha avanzado por varios frentes hasta situarse en Goma, capital de unos dos millones de habitantes, sede de ONG internacionales e instituciones de la ONU, y que el grupo ya ocupó durante diez días en 2012.
Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la misión de paz de la ONU (Monusco).
EFE
