Los libros toman Fráncfort desde este miércoles con un centro de conferencias que contará con representación de 95 países, más de 1.000 autores y 650 actos
La feria de Fráncfort empieza este miércoles
La Feria del Libro de Fráncfort, la más grande del mundo en el sector editorial, abrió este miércoles sus puertas al público entre llamamientos a un acuerdo de paz en Oriente Medio, menciones a la guerra en Ucrania y debates sobre la inteligencia artificial.
Los libros toman Fráncfort desde este miércoles con un centro de conferencias que contará con representación de 95 países, más de 1.000 autores y 650 actos, según datos de la organización, que destaca la importancia de los agentes literarios en la misma.
Junto a Oriente Medio, la invasión rusa de Ucrania también tuvo su espacio durante una primera jornada en la que la editora Anastasia Leonova, la periodista cultural Anastasia Platonova y la traductora Roksolana Sviato reflexionaron sobre cómo ha cambiado su trabajo tras el estallido de la guerra.
Las ponentes coincidieron en señalar que la cultura en el país había vivido una transformación muy fuerte, en el que la producción había aumentado debido a que no tenían el privilegio de esperar, ya que no sabían lo que pasaría mañana.
"Han sido tres años de guerra y de esprint, porque nos parecía que con un poco más de esfuerzo romperíamos algún techo de cristal y que con eso terminaría la guerra o seríamos percibidos y escuchados de otra manera, pero parece que no", argumentó Platonova.
Leonova insistió en la necesidad de implementar los proyectos sobre lo que ocurre en Ucrania ahora, ya que mañana la agenda puede cambiar: "Por eso la industria cultural sigue funcionando pese a todas las dificultades: empezando por los apagones, los bombardeos y, por supuesto, el agotamiento moral".
En la 76ª edición de la Feria, Italia tomó el relevo a Eslovenia como invitada de honor, con un pabellón de 2.000 metros cuadrados que es "una alegoría a las plazas italianas", donde los autores tanto han escrito y cualquier cosa puede pasar, según su diseñador, Stefano Boeri Interiors.
Así, Italia quiere que su pabellón se convierta en "una plaza europea", donde "nada es imposible", que sirva de encuentro para autores y visitantes, con dos escenarios en las que se van a celebrar más de 50 lecturas, charlas y debates.
Con información de EFE
FUENTE: EFE