La intendencia de Maldonado había detectado a través de las imágenes de un dron que la casa que el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Rodrigo Arim, tiene en el balneario Solís se encontraba en situación irregular, puesto que su extensión era mayor a la que se había declarado ante la comuna, según supo El Observador.
Este martes, el programa La pecera de Azul FM informó que el jerarca nunca regularizó su vivienda en ese lugar de la costa esteña. El exrector de la Universidad de la República adquirió allí en 2011 un terreno de 898 metros cuadrados, y construyó una casa de 127 metros cuadrados entre 2015 y 2016.
Sin embargo, la vivienda no figura registrada en su totalidad ante la Dirección Nacional de Catastro, donde únicamente constan 24 metros cuadrados edificados. Debido a este registro parcial, el predio figura como de bajo valor, lo que derivó en su exoneración automática del Impuesto de Primaria por parte de la Dirección General Impositiva (DGI).
En 2015 la Intendencia de Maldonado había autorizado el permiso de construcción para que se realizara una obra en ese padrón donde ya existía una construcción de "un ranchito" de 24 metros cuadrados.
Pero nunca se terminó el trámite, ya que no se presentó el final de obra, que es lo que habilita a la intendencia a notificar a Catastro para que esta oficina ajuste los valores del terreno. Es con ese nuevo valor que la administración municipal hace el reajuste de la Contribución Inmobiliaria, y la DGI el del Impuesto de Primaria.
La comuna de Maldonado detectó que muchos contribuyentes no realizaban el trámite de final de obra para pagar menos impuestos y por eso aprobó una norma para que, aunque ese papeleo no fuera finalizado, los propietarios debieran pagar los impuestos correspondientes si la casa era habitable.
Fue así que empezó a fiscalizar las fincas por medio de un dron y detectó que, entre otras muchas propiedades, la casa de Arim era más grande que lo declarado. A partir de 2026 el jerarca deberá pagar en relación al tamaño de su propiedad. La intendencia le notificará en breve por medio de un cedulón, que establecerá el cobro de lo que se debe desde el año próximo.
En rueda de prensa, Arim dijo este martes que usa la vivienda habitualmente, pero no tiene final de obra debido a defectos constructivos. Sobre cuándo tendrá el fin de obra listo, dijo que primero tiene que resolver "problemas estructurales". "Toda la obra se realizó haciendo los aportes correspondientes", añadió e insistió en que ha hecho uso "familiar" de la casa.
"En la medida en que la casa fue habitable, la fuimos usando. La casa está totalmente declarada en el BPS, no se construyó un metro cuadrado sin pagar al BPS y las solicitudes a la Intendencia de Maldonado", sostuvo. Incluso dijo que la casa fue alquilada en algunas temporadas.
Sobre la posibilidad de renunciar ante este episodio, Arim sostuvo que "siempre está disponible" a lo que diga el presidente Yamandú Orsi. "Me es muy difícil hacer autocrítica, porque nunca desarrollamos la obra en negro, sin hacer los aportes. Están registrados todos los aportes laborales", indicó y añadió: "Tengo la enorme tranquilidad en no haber incurrido en ninguna irregularidad".
