La defensa de la familia de Gustavo Basso y su esposa, Daniela Cabral, presentaron un escrito ante el Juzgado de Concursos de 1er Turno. En el documento, al que tuvo acceso El Observador, se indica que Cabral “nada tuvo, ni tiene que ver con la administración de las sociedades concursadas” en referencia a Conexión Ganadera y Hernandarias XIII.
“Jamás ocupó el cargo de administradora de Conexión Ganadera ni de Hernandarias XIII, ni formalmente, ni de hecho”, indica el texto firmado por los abogados Eduardo Sasson y Pablo Donnángelo.
De acuerdo con el documento, las tareas de Cabral se “limitaban exclusivamente a la operativa de pagos, esto es, realizar y recibir” dinero. Se argumenta que “los verdaderos administradores” eran Gustavo Basso y Pablo Carrasco, el otro socio de Conexión Ganadera.
“Incluso, tampoco se asemejaban a las tareas que realizaba la señora Ana Iewdiukow”, en referencia a la esposa de Carrasco y una de las socias de Hernandarias XIII, la empresa que era tomadora del 90% del ganado de los inversores de Conexión Ganadera.
Para Sasson y Donnángelo, el “simple hecho de que Cabral haya mantenido un vínculo afectivo con el que fuera el administrador de Conexión Ganadera, Basso, no determina, ni prueba su calidad de administradora ni que estuviera en conocimiento del estado patrimonial de la sociedad”.
Sobre Pablo Carrasco
Para la defensa de Cabral, Carrasco “contrató profesionales de su confianza a los efectos de que la teoría representara los intereses de la sociedad en el concurso”, en referencia a la solicitud que realizó el empresario para llevar a concurso de acreedores a Conexión Ganadera, luego de que se conociera que tenía un pasivo de US$ 250 millones.
Lo mismo sucedió, según Sassón y Donnángelo, para la sociedad Hernandarias XIII “cuyos accionistas son los señores Carrasco e Iewdiukow”. Para los penalistas, se cometió un error al poner bajo el mismo paraguas a Hernandarias y Conexión Ganadera, dado que no forman parte de un grupo empresarial.
En el mismo documento del concurso, Carrasco y su esposa –“sin la aprobación de Cabral” y el resto de la familia Basso– “atribuyó la responsabilidad de los hechos en análisis a Basso y su familia”. “Preferimos no calificar este acto”, indica el escrito.
Tal y como informó El Observador el pasado sábado, Carrasco indicó al aceptar el concurso: “Cabe reiterar y así lo expongo, que la división de tareas, por acuerdo y por fuerza de los hechos, determinaba que desconociera con claridad la situación económica/financiera de las empresas” (...) el compareciente no tenía acceso directo a los estados contables de conexión ganadera, tampoco a información fiscal”.
Pablo Carrasco y Ana Iewdiukow, socios de Conexión Ganadera
Pablo Carrasco y Ana Iewdiukow, socios de Conexión Ganadera, en la primera audiencia del caso
Foto: Inés Guimaraens
En esa misma instancia, el empresario agregó: “Así fue admitido por los sucesores de Basso en sus declaraciones y en su propio accionar, continuando a cargo durante todo este tiempo, del manejo económico financiero de la empresa”(...) la crítica situación financiera de la empresa, (cuyos detalles y entidad, que con la necesaria profundidad solo pudo ser conocida por Basso, se advierte en los primeros días de Diciembre de 2024”
Sassón y Donnángelo calificaron de falsas estas afirmaciones. “Contribuye una subestimación a la inteligencia de la sede suponer que el señor magistrado creerá que Carraso y su esposa, siendo el 50% del paquete accionario de Conexión Ganadera, no tuvieran acceso a los estados contables de dicha empresa”, agregan.
Los penalistas aseguran que “también es falso” que Carrasco haya tomado conocimiento de la situación de la empresa recién en diciembre del año pasado.
Los abogados y la familia de Basso indican que “dichas afirmaciones y valoraciones” nunca le fueron consultadas a Cabral. “De hecho, ni siquiera tuvieron la delicadeza de compartirnos dicho escrito ya que nos enteramos por nuestros abogados y la prensa”, sostuvo.
“Carrasco -en supuesta representación de una sociedad que integró- presenta un escrito donde se atribuye de forma más que temeraria la responsabilidad a la compareciente y su familia en relación al estado de cesación de pagos de Conexión Ganadera”, apuntan los defensores de la familia Basso.
Los contratos
Sassón y Donnángelo calificaron de “mala fe” el actuar de Carrasco y aseguran que “busca encubrir su responsabilidad”.
Por otro lado, explicaron: “Los contratos de Conexión Ganadera tienen tres partes: el inversor o dador, el administrador (Conexión) y el tomador (del ganado)”, explican en el escrito.
En el último punto insisten en que el 90% de las cabezas de ganado de los inversores eran tomadas por Hernandarias XIII. Entre las obligaciones de las empresas que tomaban animales, estaban las de reponer ante muerte o pérdida y pagar a Conexión Ganadera por la venta del ganado, indica el texto y aclara que esto “difiere según la modalidad del contrato”.
“El síndico durante su labor determinará o hallará un incumplimiento en estas obligaciones o un faltante de ganado en custodia por parte de Hernandarias XIII, esta última sería deudora de Conexión Ganadera”, agrega el documento.
Sobre Hernandarias, Sassón y Donnángelo hacen una serie de preguntas para representar cuál es su teoría para explicar la caída de Conexión Ganadera.
“¿Qué sucede si Hernandarias XIII (sociedad de Carrasco y Iewdiukow) no ha destinado el dinero entregado por Conexión Ganadera para la adquisición de ganado? ¿Qué sucede si Hernandarias XIII no ha cumplido con su obligación contractual de reponer el ganado en su custodia? ¿Qué sucede si Hernandarias XIII no ha cumplido su obligación contractual de pagar a Conexión Ganadera el precio que tenía pactado por la venta del ganado? ¿Qué sucedería si eventualmente Hernandarias XIII le dio otra utilidad al dinero entregado en perjuicio de conexión y los inversores?”, cuestionan los penalistas.
Frente a estas hipótesis, no solo sería la empresa tomadora la responsable del impago a los inversores, sino que “Pablo Carrasco y Ana Iewdiukow serían los únicos responsables de todo este suceso y su responsabilidad no solo se limitaría a la esfera patrimonial, sino también a la esfera penal”.
Bajo estos argumentos es que los abogados infieren que la “estrategia asumida” por Carrasco “no solo esconde comportamiento ruin sino que busca solapadamente eludir y evadir su responsabilidad patrimonial y penal, perjudicando a Conexión Ganadera”.
Para cerrar el escrito, los penalistas recordaron una entrevista de mayo de 2022 en En Perspectiva. En esa instancia, Carrasco e Iewdiukow hablaron de Hernandarias XIII y aseguraron: “Nosotros dos como agrónomos administramos, tenemos una empresa que se llama Hernandarias que toma mucho ganado de Conexión Ganadera. Somos tomadores. Y, a su vez, tenemos muchos tomadores particulares elegidos de la manga, que sean buenos”.