El empresario uruguayo de 50 años Mauro Almeida fue imputado por la Justicia por prender fuego y matar a un vecino en la localidad de Villa Argentina (Canelones) el pasado 22 de noviembre.
El ahora imputado deberá cumplir seis meses de prisión preventiva, mientras avanza la investigación a cargo del fiscal de Atlántida Ignacio Montedeocar.
Almeida fue formalizado por los delitos de homicidio muy especialmente agravado, asociación para delinquir e incendio agravado.
La semana pasada Interpol emitió orden de captura para el empresario y en las últimas horas se entregó en el Juzgado de Atlántida. Por este caso, ya había otras dos personas imputadas.
El caso: magia negra, antecedentes de violencia doméstica y búsqueda de Interpol
El empresario, director de una hormigonera, pidió ayuda a dos conocidos para prender fuego el cerco de un vecino, con la idea de anular un "trabajo espiritual" de magia negra que creía habían realizado para alejarlo de su familia.
Cuando los implicados comenzaron a incendiar el cerco, otro vecino intentó detenerlos, ya que el cerco incendiado lindaba con su hogar.
En ese momento, el empresario lo golpeó, lo roció con nafta y lo prendió fuego, antes de fugarse del lugar. Horas después la víctima, de 55 años, murió en el Centro Nacional del Quemado (Cenaque) por las heridas sufridas.
Uno de los imputados en primera instancia es un productor rural de Atlántida de 49 años, amigo del empresario; mientras que el otro tiene 69 y es su tío.
La Justicia dictaminó que ambos no son responsables del homicidio, y los imputó por los delitos de "asociación para delinquir", encubrimiento e incendio agravado –el tío del empresario en calidad de cómplice en este último–.
Almeida se entregó en las últimas horas en el Juzgado de Atlántida, luego de que Interpol emitiera una orden de captura internacional la semana pasada.
Fuentes de Interpol confirmaron que tenía un pasado como piloto de cuatriciclo en distintas carreras, incluso participó en el Rally Dakar 2015.
A principios de 2024 el empresario había sido condenado por un delito de violencia doméstica, luego de atacar a su mujer. La víctima relató que, mientras la golpeaba, le hablaba sobre "seres malignos" y magia negra.