La Fiscalía archivó la causa por la que investigaba a Mario Layera debido a los traslados del narcotraficante Gerardo González Valencia desde su lugar de reclusión en la sede de la Guardia Republicana hasta el edificio de la ex Cárcel Central para reunirse con su colega Roco Morabito.
El archivo, que le fue notificado a Layera, se dio en medio de que la bancada de senadores del Partido Nacional resolviera no votar la venia para que Layera sea director de Inteligencia, tal y como preveía el gobierno de Yamandú Orsi.
En su declaración, Layera aclaró que las salidas para visitas conyugales de González Valencia fueron otorgadas por el exministro del Interior Eduardo Bonomi. “A su criterio, conceder estas visitas era un altísimo riesgo, ya que su convicción era que González Valencia buscaba fugarse, pero el ministro dictaminó que era un tema de derechos humanos que no podía evadirse”, indica el texto.
El exdirector de la Policía Nacional declaró, además, que su opinión no fue consultada a la hora de tomar la decisión. Indicó que la ex Cárcel Central, “dentro de las pocas opciones, era el lugar más adecuado”.
La Fiscalía, en representación de Silvia Porteiro, concluyó que “cada una de las salidas para visitas conyugales se encontraban minuciosamente reguladas y documentadas con conocimiento de las jerarquías del gabinete ministerial de Interior, INR y la Guardia Republicana”.
Luego las autoridades hicieron una cronología con todas las salidas conyugales del narco e indicó que fueron “resoluciones atribuibles a las altas jerarquías del Ministerio del Interior que funcionaban con órdenes verbales y por tanto desprovistas de fundamentación de los motivos fundantes”.
El archivo también alcanzó al exdirector de la Guardia Republicana, Alfredo Clavijo, dado que esta división del Ministerio del Interior se limitaba a cumplir con las órdenes relacionadas al traslado de González Valencia.
La Fiscalía concluyó que “no resulta acreditada en la causa la existencia de conducta penalmente relevante en relación a Alfredo Clavijo, Fabián Monzón y Mario Layera”.
