El robo y posterior rescate de Rosendo, un guacamayo del Bioparque de Melo, dejó una historia insólita en los medios locales de Cerro Largo.
Según el Canal Doce de Melo, Rosendo fue parte de un decomiso de fauna exótica que hizo Aduana hace más de tres años. Terminó en el Bioparque donde se volvió una de las atracciones favoritas de la gente.
"Posiblemente lo hayan traído de Brasil o Paraguay", explicó el responsable de los animales de la reserva, Luis Vescia, en diálogo con Cerro Largo Portal.
Mientras el parque estaba cerrado este lunes, un grupo de personas ingresó, rompió el candado y se llevó al animal.
Una llamada advirtió a la Policía Municipal de lo que había pasado y así efectivos empezaron la persecución.
Según Cerro Largo Portal, siguieron a los ladrones entre los árboles del monte nativo. Uno de los ladrones se tiró al Arroyo Conventos. Ahí, soltó al loro y se escapó nadando.
"El animalito cayó al agua también y fue rescatado por los gurises", dijo el director de la Policía Municipal, José Luis Medeiros, al citado medio.
"Fijate vos que el bichito estaba en shock y nadó todo lo que pudo hasta llegar a la orilla", continuó.
Los policías llegaron a agarrarlo, pero el animal les clavó las garras y los picó.
"Están picados, pero contentos, porque logramos salvar al loro y controlar la situación que nunca imaginamos", celebró Medeiros.
Embed - Canal Doce Melo on Instagram: "Rosendo, un guacamayo amarillo de vivos colores que reside en el Bio Parque de Melo, se ha convertido en una de las atracciones favoritas del lugar desde que fue rescatado hace más de tres años en un decomiso de fauna exótica realizado por la policía y aduana. Este martes, sin embargo, fue protagonista de un suceso dramático: un grupo de personas ingresó al parque aprovechando que estaba cerrado, rompió el candado de su jaula y se lo llevó, escapando por la costa del arroyo Conventos. Afortunadamente, un testigo anónimo presenció el robo y avisó de inmediato a los funcionarios del parque, quienes contactaron a la Policía Municipal. Así comenzó un operativo de búsqueda en la zona, y al verse perseguidos, los secuestradores optaron por arrojar a Rosendo al agua antes de huir. Gracias a la rápida y valiente intervención de los oficiales Adán Pereira y María Núñez, Rosendo fue rescatado del arroyo y devuelto sano y salvo al Bio Parque, donde sus cuidadores, como Leticia, se mostraron profundamente agradecidos y aliviados por su regreso."