El escenario sobre la Plaza Independencia, a los pies del monumento a José Gervasio Artigas, continúa armándose y su evolución es la muestra más tangible de que el cambio de mando está próximo a ocurrir. Que a Luis Lacalle Pou le quedan días –menos de diez– como presidente y que Yamandú Orsi está en las gateras para ponerse la banda presidencial y asumir como nuevo jefe de Estado.
Sabedor de que lo que haga en estos días tiene un alto espíritu simbólico por ser parte de una despedida, Lacalle Pou decidió que pasará sus últimos días en diversos departamentos del interior participando de actos e inauguraciones de obras realizadas por su administración.
Es algo que hizo durante todo su gobierno porque considera fundamental que los políticos acompañen a la población cuando comienzan a funcionar infraestructuras que fueron desarrolladas con recursos públicos.
El mandatario estuvo el viernes 21 en el campus de Maldonado inaugurando una piscina semiolímpica y el miércoles 19 participó en San Ramón de la inauguración de la rehabilitación de 78 kilómetros de la ruta 6, una obra que considera de las “más justas del país”.
“La práctica nuestra ha sido estar en cada rincón del país para conocerlo, quererlo, interpretarlo y hacernos cargo”, dijo. El jueves presenció el embarque de toros que fueron enviados como regalo al presidente de China, Xi Jinping.
Lacalle Pou prevé continuar el raid en la última semana, según dijeron fuentes de Presidencia. El jueves 27 proyecta estar en Treinta y Tres en la inauguración de un tramo de la ruta 8 y el viernes 28 viajará a Soriano.
El presidente saliente anhelaba que su último acto como gobernante fuera en el departamento donde nació la patria e incluso llegó a decir públicamente que le gustaría despedirse inaugurando –al atardecer– el nuevo puente de acceso a Dolores sobre el río San Salvador.
Sin embargo, esto no podrá ocurrir por una razón de índole formal y otra técnica. Un decreto de Tabaré Vázquez del año 2007 establece que el presidente saliente debe estar a las siete de la tarde del último día de febrero en la Plaza Independencia para recibir el pabellón nacional.
“El último día hábil de mandato constitucional del señor presidente de la República se procederá en la explanada del edificio de la Presidencia a la realización de la ceremonia de arriado del Pabellón Nacional”, dice el artículo 139 de esa normativa, mientras que el siguiente establece el horario de una ceremonia que incluye desfiles del cuerpo de Blandengues.
A su vez, si bien el gobierno pidió acelerar las tareas, la obra no está pronta –tiene un 70% de avance– por lo que Lacalle Pou prevé simplemente recorrerla el mediodía del viernes.
En la mañana, el mandatario participará en Mercedes del acto y desfile por los 214 años del “Grito de Asencio” y llegará en la tarde a Montevideo.
Antes de recibir el pabellón, el presidente convocó a un Consejo de Ministros ampliado. Para estas citas, también invitó a los jerarcas que formaron parte del Poder Ejecutivo durante este período y a los tres coordinadores del Grupo Asesor Científico Honorario (GACH), Rafael Radi, Henry Cohen y Fernando Paganini, informó Telemundo.
Para ese acto final, el Partido Nacional está convocando desde principios de febrero a sus militantes bajo la consigna “orgullosamente gracias”.
Visita sorpresa y viaje
Al comienzo de su mandato, Lacalle Pou escribió en un pizarrón cuáles eran los principales proyectos de su gestión y durante el período iba haciendo anotaciones para graficar el avance que tenía cada uno. Allí estaba el puente del San Salvador, el del 329 y mejoras en las rutas 6 y 8, entre otras.
Otro de esos proyectos fue el hospital del Cerro, el cual fue construido de cero por la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) en un predio contiguo a donde funcionaba el centro de salud del barrio.
El miércoles, antes de viajar a Canelones, Lacalle Pou cayó de sorpresa al hospital sin avisarle al director. “Fui sin avisarle a nadie y entré por la puerta. No saben la satisfacción que me generó”, contó y recordó que hubo “campaña en contra a un hospital en la zona donde más necesitaba”.
Tras la asunción de Orsi, Lacalle Pou prevé realizar dos viajes al exterior que ya fueron autorizados por el Parlamento y se incorporará al Centro de Estudios para el Desarrollo (CED), el think tank liberal liderado por el economista Hernán Bonilla.