El dueño de Grupo Larrarte, Jairo Larrarte, sostuvo que el mensaje que envió a grupos de WhatsApp donde ofrecía una inversión ganadera fue a "título personal" y que "en ningún momento se ha actuado por fuera del marco legal".
Grupo Larrarte se encuentra actualmente siendo investigado por Fiscalía por diversos delitos de estafa y apropiación indebida. A principios de noviembre, la empresa fue declarada en concurso por lo que Jairo Larrarte no tiene la potestad de ofrecer negocios en su nombre. El síndico a cargo del grupo podría presentar propuestas para generar ingresos para la masa activa, pero quien mandó el mensaje sobre el que informó El Observador este sábado fue Larrarte persona física.
A través de un mensaje de Whatsapp difundido en diversos grupos, Larrarte presentó una “propuesta de capitalización” en campos de Rivera que incluían entre 500 y 2.000 cabezas de ganado.
"Él me había comentado algo de este negocio pero nada más. El mensaje fue por su cuenta", dijo el síndico Alfredo Ciavattone a El Observador.
En el comunicado que emitió Larrarte tras la citada nota sostiene que desde el inicio del proceso concursal, todas las acciones que llevó adelante fueron informadas al síndico designado. "En ningún momento se ha actuado por fuera del marco legal o sin su conocimiento. Cualquier iniciativa concreta vinculada a los campos y a la capitalización de ganado será remitida oficialmente por los interesados y evaluada por quien corresponda", sostuvo en el texto.
Por otra parte, dijo que el mensaje en cuestión fue enviado a "título personal y tiene como único propósito proponer la capitalización de ganado en campos para evitar que queden vacíos e improductivos por largos períodos".
Larrarte subrayó que el mensaje "no hace referencia a la captación de dinero, fondos ni inversiones". "Se trata exclusivamente de una propuesta destinada a generar ingresos productivos que contribuyan de manera directa a la masa activa del concurso", continuó.
"Como persona física, tengo el derecho de velar por el interés futuro de mi empresa y clientes, teniendo en todo momento presente la realidad actual de la misma y la función de las personas que están al frente del proceso concursal", concluyó en el comunicado.
El Grupo Larrarte fue denunciado por estafa, apropiación indebida, abigeato y falsificación de documento. Los abogados de los afectados estiman que las pérdidas llegan a los US$ 10 millones. Sobre Jairo Larrarte pesa un cierre de fronteras hasta fines de marzo y la Justicia la retuvo el pasaporte y lo obligó a fijar un domicilio.
La semana pasada, la defensa de los afectados presentó una ampliación de denuncia por asociación para delinquir contra el Grupo Larrarte.