Pablo Carrasco y Gustavo Basso, administradores de la empresa Conexión Ganadera (CG), cedieron la mayor parte de la sociedad de la compañía a sus esposas de forma cruzada en mayo de 2024, meses antes de ser denunciada por cientos de sus inversores por no poder pagar sus compromisos, confirmó El Observador.
Fuentes del caso informaron que Carrasco y Basso, quien falleció en un accidente de tránsito en Florida el pasado 28 de noviembre, cedieron 20 de sus cuotas sociales de CG a sus esposas Ana Iewdiukow y Daniela Cabral el 31 de mayo de 2024, información que fue ratificada por el Diario Oficial el pasado 3 de setiembre.
La cesión fue realizada de forma cruzada: Carrasco cedió sus cuotas a Cabral, esposa de Basso, y su socio cedió su parte a Iewdiukow, la esposa de Carrasco. Distintas fuentes explicaron que esto fue realizado porque el artículo 1.675 del Código Civil marca que "es nulo el contrato de compra venta entre cónyuges no separados de cuerpos".
Según consta en la información registral de Conexión Ganadera, a la que accedió El Observador, la empresa se constituyó formalmente el 1° de abril de 2001 con cinco socios, entre los que estaban Basso y Carrasco como administradores. En 2003, los otros tres inversores cedieron su parte de la compañía a Iewdiukow y Cabral.
La cesión de Carrasco, quien hoy es único director de la compañía, y Basso a sus esposas fue el primer movimiento de su parte como socios desde la fundación de Conexión Ganadera. Ambos quedaron con cinco cuotas sociales, una parte minoritaria de la empresa.
¿Qué consecuencias pueden traer para Carrasco y las esposas esta cesión?
El abogado Santiago Alonso, parte del estudio que presentó la solicitud de concurso necesario para Conexión Ganadera, dijo a El Observador que a las esposas de Carrasco y Basso "les cabe responsabilidad penal y civil" como "las representantes de la empresa".
"En caso de que hayan cedido todas las acciones, Carrasco se habría deslindado de Conexión Ganadera, lo que no hace que no vaya a tener consecuencias en la justicia", continuó el defensor, que representa a más de 100 inversores afectados de CG que denunciarán al director de Conexión Ganadera.
Por otra parte, para Alonso "no queda claro el rol de Carrasco", porque "le cedió acciones a la esposa (de Basso) pero hasta hace unos meses llamaba a invertir en la empresa diciendo que era el negocio más seguro del mundo".
"Además, desde que cedió las acciones hasta ahora firmó contratos nuevos con nuevos clientes, por lo que eso podría configurar una nueva estafa en caso de que haya cedido todas las acciones", agregó.
Para Alonso y su equipo "este es un nuevo indicio", ya que entiende es "bastante suspicaz" que Carrsco cediera acciones de su empresa meses antes de que su situación económica se complicara: "Uno podría intuir que sabía que estaba pasando o qué iba a pasar".
Más de 350 personas presentarán denuncias penales contra Pablo Carrasco esta semana por los delitos de estafa y apropiación indebida. La intención de los abogados que trabajan en el caso es que se dicten medidas cautelares contra el director, como el cierre de fronteras.
"La Fiscalía y el Poder Judicial frente a la situación de público conocimiento deberían tomar medidas en lo inmediato, para evitar que se frustre la investigación de unos de los desfalcos más grandes en la historia del Uruguay. La gravedad y la dimensión de la situación así lo determinan", dijo el abogado Juan Pablo Decia a El Observador el pasado jueves.
