Los senadores de la oposición, Álvaro Delgado-Partido Nacional- y Andrés Ojeda -Partido Colorado- se mostraron críticos ante las declaraciones del canciller de la República, Mario Lubetkin, que aseguró que el nuevo gobierno no reconoce a Nicolás Maduro "ni a quien dijo haber triunfado" en Venezuela en referencia a Edmundo González Urrutia.
Para Delgado, que el gobierno no reconozca a Maduro y tampoco a González Urrutia y a su vez asuma que "hubo un fraude en las elecciones" en Venezuela, representa una posición "un poco contradictoria".
El dirigente blanco afirmó además que las palabras de Lubetkin representan un "retroceso en materia institucional y de prestigio internacional del Uruguay".
"Venezuela es una dictadura, no hay duda de eso. Hubo fraude, no hay duda de eso y, por ende, Maduro no es el presidente", dijo en rueda de prensa.
Finalmente, sostuvo que esta decisión no es "buena señal" y que Uruguay no empieza "bien en materia de política internacional".
Por su parte, el senador colorado dijo en rueda de prensa que los dichos del canciller representan un paso atrás "enorme" para el país.
"Rompe la vista la contradicción. Todos estamos de acuerdo en que Maduro es un dictador y no ganó. Tuvo un solo oponente, y si Maduro no ganó tampoco ganó el otro. Es hacer malabares con la incomodidad. Ni uno, ni otro, ni todo lo contrario,. En esto hay que jugársela", dijo.
Tras esto, Ojeda cruzó a la vicepresidenta de la República, Carolina Cosse, que horas antes se refirió al tema y dijo que a ella le interesa "hablar de Uruguay" y la situación del país.
"La solidaridad no es selectiva. Lo que pasa en un país sudamericano que está viviendo una dictadura propia de otros tiempos de la región, que mata a personas, que las desaparece, que no deja trabajar a los periodistas, que persigue políticos. A mí me parece que mirar para el costado es muy irresponsable", sostuvo.